Surcan el agua

Tomás (19) y Pedro (23) Correa son dos exponentes del windsurf puntano, que llegaron a este deporte de rebote y lo abrazaron hace cinco años con pasión, dedicación y talento.

“Empezamos con longboard, pero a nuestro papá no le gustaba mucho por la peligrosidad, y un día fuimos a pasear a La Florida, se encontró con el windsurf y aunque al principio no nos gustó, tenía un conocido en un camping y nos metimos de a poco en este deporte. Se compró una tabla y empezamos a ir los fines de semana. Fue en el 2011 y hoy podemos decir que nos encanta”, coinciden los hermanos.

“A Pedro no le llamaba mucho la atención, mientras navegábamos y nos golpeábamos en el agua, él estaba afuera”, remarca Tomás. “Pero un día que era muy feo para subirse a la tabla, empecé y no paré más”, dice “Peter”.

Compiten en división raceboard. “Podés navegar con cualquier tipo de viento, sea muy bajo, medio o alto. Es una categoría más técnica, con más esfuerzo, pero con un menor costo del equipo”, cuentan.

LEÉ LA NOTA COMPLETA EN LA EDICIÓN IMPRESA