Los pacientes que están en el Centro "Di Pasquo" tienen entre 15 y 65 años

La exfábrica SCAC, bautizada como centro de tratamiento para casos leves  “Monseñor Emilio Di Pasquo”, recibió el viernes a los primeros puntanos con síntomas menores de COVID-19. Con los que fueron redireccionados durante el fin de semana, en la actualidad son catorce los pacientes (9 mujeres y 5 hombres) que son atendidos en sus instalaciones. Señalaron que las edades están comprendidas entre los 15 y los 65 años.

La jefa del Programa Atención Primaria de la Salud (APS) del Departamento Pueyrredón, Marcela Weiher, afirmó que el predio ya estaba preparado desde hace cinco meses para cualquier eventualidad que surgiera en relación al coronavirus, pero que no se utilizó dado que el número de contagios era menor y todos los infectados podían ser derivados al Hospital San Luis.

“Las personas con síntomas leves, o inclusive asintomáticos, estaban en promedio de 10 a 21 días solo para estar aislados. Pero la situación cambió y nos exige que las camas sean destinadas a aquellos que se encuentran con la afección en un estado moderado o grave. Ellos requieren de un soporte sanitario especializado”, precisó Weiher.

Sobre a quienes reciben en el Centro "Di Pasquo", la jefa del programa explicó que son aquellos que no tienen ningún factor de riesgo o comorbilidad, es decir, no son diabéticos, asmáticos, inmunosuprimidos; como tampoco sufren problemas cardíacos, renales u oncológicos.

Resaltó que algunas de las molestias que pueden manifestar los afectados por COVID-19 son decaimiento, malestar general y dolor de cabeza. La especialista señaló que la finalidad de que los pacientes leves estén en ese establecimiento es para garantizar el aislamiento y contribuir a evitar la diseminación comunitaria de la enfermedad.

“Los cuidados que necesitan son mínimos, pero si presentan algún signo desfavorable en su evolución son enviados al Hospital Central”, dijo la jefa del programa, quien manifestó que también se toman los máximos recaudos cuando son trasladados desde el domicilio o les realizan el "triaje", que es un sistema de selección y clasificación de pacientes de urgencias.

Weiher señaló que en el centro cuentan con una enfermera por turno, para así controlar de manera adecuada a las personas. “Ellas observan su mejoría y les realizan los testeos que se hacen al décimo y al vigésimo primer día. También se les brinda la comida y todos los servicios”, dijo y resaltó que cuentan con una capacidad de 250 camas.

“Cada uno de los espacios se dividen por box. Hay tres camas que  están dispuestas para cumplir con el distanciamiento. Hay otras que tienen ocho por si viene algún grupo familiar para que así estén juntos”, afirmó.

Transformación

La exfábrica SCAC era un predio de cuatro hectáreas abandonado ubicado entre las avenidas Centenario, Justo Daract, Fuerza Aérea y Granaderos Puntanos, en el norte de la capital provincial.

El Estado puntano comenzó a construir ahí un centro integrador con una escuela generativa, una sede de bomberos, oficinas administrativas, dependencia policiales, y aulas de la UPrO, entre otros espacios.