Una puntana vivió de cerca la ola de tornados que azotó a Estados Unidos

El viernes pasado una serie de tornados azotó a varios estados de Estados Unidos, como es el caso de Kentucky, Illinois, Missouri, Arkansas, Mississippi y Tennessee, que dejaron un saldo de al menos 94 muertos y destrozos en general. La puntana Liz Lucero Gitto, de 26 años, se instaló hace cuatro meses en ese país y le contó a El Diario de la República cómo fue vivir de cerca ese desastre natural.

“Es la primera vez que vivo este tipo de experiencia. Se cayeron árboles, pero por suerte en el lugar en el que vivo no pasó nada grave. A unos conocidos se les cayó un árbol encima de la casa. Ellos por suerte ya se habían ido”, dijo la puntana que vive en Elizabethtown, una ciudad ubicada en el condado de Hardin, en el estado de Kentucky. Llegó a Norteamérica a través del programa Au Pair, que les brinda a los jóvenes de entre 18 y 26 años la posibilidad de vivir una experiencia cultural, a través del cuidado de los niños de una familia norteamericana.

Es la primera vez que vivo esta experiencia. Donde vivo no es zona de tornados, por eso fue inesperado". Liz Lucero Gitto, puntana que vive en Estados Unidos.

 

“El viernes a la mañana, Ali Aman, la mamá de los pequeños que cuido, me mandó un artículo de un diario, que decía que habría una tormenta fuerte y que había alerta de tornado, pero no en la zona en la que nosotros vivimos, sino en lugares cercanos”, comentó.

Precisó que por lo general ellos le prestan el auto. “Pedí permiso y me dijeron que sí, por lo que con unas amigas nos fuimos alrededor de las siete de la tarde a Louisville, luego dejamos los vehículos en la casa de una de ellas y nos fuimos a cenar”, manifestó.

Al llegar a una de las avenidas principales del lugar notaron que las calles estaban vacías. “Los restaurantes y bares estaban abiertos, pero adentro no había nadie. El clima era raro, estamos en pleno invierno y no hacía frío. Apenas nos sentamos a comer se largó a llover muy fuerte”, recordó Liz. Al salir, los mismos chicos que trabajan en el lugar les advirtieron que fueran con cuidado, ya que la alerta seguía vigente.

“Llegamos totalmente mojadas. En todos los monitores del bar había un cartel que decía amenaza de tornados para la zona de Kentucky y otros lugares. Ese anunció era válido hasta las 23:30 del viernes. Allí nos quedamos hasta la una de la madrugada y nos fuimos hasta el departamento. En el camino volvió a llover y el viento era muy fuerte”, detalló la joven puntana. La tormenta asustaba, aseguró. “Nos dormimos y a la madrugada sentimos un ruido fuerte, una de las puertas había quedado mal cerrada, se abrió y se estampó. Casi se rompen cosas dentro de la casa”, manifestó.

A la mañana siguiente, alrededor de las nueve, tomó su teléfono y el coordinador del intercambio les consultó cómo estaban. “Nos mandó un mensaje al grupo para saber si todas estábamos bien. Luego empecé a recibir artículos sobre la tragedia; el tornado fue uno de los más grandes de la historia de EE.UU”, detalló. Liz señaló que Kentucky no es una zona de tornados, por lo que fue inesperado. Además precisó que los teléfonos de marca iPhone les avisan a sus usuarios cómo prepararse ante una situación así.

“Te pide que no pongás el teléfono ni en silencio ni en vibrador, que escuches la radio y que antes de acostarte tengas un plan para ir a un lugar seguro. En la mayoría de los casos van a sus mismos sótanos”, contó.