El incesante pedido para que les den "cheques en blanco"

El ministro Néstor Ordoñez terminó esta semana con su cometido de intentar explicar en la Legislatura los alcances de la iniciativa que por estos días desvive a la gestión Poggi. El proyecto de ley está titulado, lisa y llanamente, “de endeudamiento”, tiene solo seis carillas, escasos once artículos y después de leerlo, quedan un montón de interrogantes que ni el Gobernador ni los funcionarios pueden responder.

A diferencia de lo que dice Poggi en sus apariciones públicas, el soñado empréstito no tiene un monto definido. El mandatario ha machacado que iba a ser por 150 mil millones de pesos o 150 millones de dólares. Pero el articulado expresa que el crédito será de “hasta la suma equivalente a seis veces el importe que en concepto de Coparticipación Federal le correspondiere percibir en un período mensual”.

Y más aún, porque faculta al Estado a poder endeudarse en etapas y permitir que el límite se calcule con lo recaudado el mes inmediato anterior al desembolso del empréstito, lo que hace que el monto total se torne ilimitado. 

En ese caso, habrá que ver que no comprometa más del 25 por ciento de la renta provincial, que se debería tomar como base “al cálculo de recursos menor de los últimos tres años”, según fija la propia Constitución Provincial.

El proyecto deja muchas otras dudas, entre ellas el tipo de moneda en que se pedirá y la tasa de interés a pagar. Como apunta a cubrir solo los gastos del Ejecutivo provincial, también pone en riesgo los recursos que les deben girar a los municipios y al Poder Judicial, entre otros organismos que podrían verse afectados, de acuerdo al análisis que hizo el bloque de senadores justicialistas.

Los “cheques en blanco” pretendidos por el nuevo Gobierno lo autoriza además a realizar todo tipo de modificación presupuestaria para priorizar el pago de la deuda a tomar. En los artículos finales aparece otro deseo insólito: ir en contra de la Ley de Contabilidad, que establece que NO se lo puede destinar a gastos corrientes, justamente la supuesta finalidad que el mismo Poggi ha reiterado para rogar tener esa suma millonaria en sus manos.