Todavía no está claro de dónde venía y hacía dónde se dirigía Sergio Gabriel Busto. Lo que sí es seguro es que a destino no llegó. El severo estado de ebriedad que cargaba no se lo permitió. Antes de llegar al cruce de calles San Luis y Mundet, perdió el control del volante y estrelló su Peugeot 206 contra una columna de alumbrado público.
Por fortuna, el joven no sufrió más que heridas superficiales. Bastó con la asistencia momentánea que los paramédicos del SEMPRO realizaron en la esquina del accidente, refirió el subcomisario Roberto Cruz, el jefe de turno ayer en la Unidad Regional II.
El choque sucedió minutos antes de las 8:30. Según lo poco que trascendió de parte del personal de la Comisaría 36ª, a cargo de las actuaciones, Busto marchaba por calle San Luis. "Probablemente con rumbo hacia el barrio 200 Viviendas", estimó José Luis Sosa, jefe de esa seccional.
"Cuando llegó a la esquina de Mundet colisionó contra un poste de luz", relató el policía. El choque no fue del todo frontal, sino que afectó el farol del lado derecho, y parte de ese costado.
El subcomisario fue cuidadoso y no se animó a confirmar qué motivó la pérdida de control del automovilista. "Los médicos lo revisaron para establecer si en el momento previo al accidente sufrió alguna descomposición, una baja o alta de presión", comentó. El jefe de turno, en cambio, sostuvo que Busto iba alcoholizado.
Hasta ayer, a la tarde, el auto rojo, patente ISA 748, continuaba secuestrado en la Comisaría 36ª. La Policía lo retenía ahí, a la espera de que el dueño fuera a buscarlo. Del joven sólo trascendió que tiene domicilio en Pizarro 178.
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