Vecinos de un barrio están preocupados por robos y piden policías

Los vecinos del barrio Jardín San Luis, uno de los más pintorescos de la zona norte de la ciudad capital, reclaman más presencia policial. Fundamentan su pedido en una seguidilla de robos en las paradas de colectivos, en comercios cercanos y en viviendas con o sin personas adentro. Contabilizan en dos meses más de 50 hechos de inseguridad. Por su parte, la Policía maneja otras cifras, mucho menores.

Una comerciante que se identificó como "Kitty", dijo que en las últimas semanas varios vecinos han sido asaltados en las paradas de ómnibus. Citó el caso de una mujer, que vive cerca de su casa, que fue golpeada porque se resistió. Los ladrones andaban en moto y sospecha que son los mismos que han cometido otros robos en la barriada.

Es tanto el temor que tiene la gente, que otra vecina, al dar su testimonio, pidió reserva de su nombre. Recordó que en el sector este de la iglesia (San Charbel), hubo robos a familias. “En los últimos dos años han ocurrido más de veinte, en casas donde no estaban los dueños. De noche, casi no salimos porque tenemos miedo, pero en el día cuando no hay gente en la calle, también hay inseguridad. Sobre todo atacan a mujeres, ladrones en moto con armas. El año pasado, a una señora le dieron una paliza porque no quería entregar la cartera y la dejaron en terapia”.

Otros síntomas que marcan la impunidad de los delincuentes es que los vecinos los escuchan andar por los techos y que otros  propietarios vendieron sus casas porque no se sentían seguros. "A uno de ellos, antes de mudarse del barrio, le robaron casi todo cuando salió a trabajar", señaló la vecina.

Por su parte Mabel, contó: “Me robaron hace dos meses y todavía no pude reponer la mercadería. Me llevaron lo que tenía más valor. Los ladrones hicieron un trabajo finísimo, entraron por la ventana (tiene rejas) y probablemente fue un niño porque no rompieron las aberturas”.  

La comerciante dio a entender que los ladrones viven en la zona. Y detalló como ejemplos dos casos que sufrieron otros colegas. A uno le robaron cuando  no estaba en el negocio y al otro lo sorprendieron cuando dormía. "Hace un año había más patrullaje y trabajaban bien”, recordó.

Ante la frecuencia de la actividad de los delincuentes, los vecinos crearon un grupo en WhatsApp para alertarse entre ellos y avisar a la Policía si notan algo sospechoso.

Los vecinos piensan que la seguridad empezará a mejorar cuando se abran cuatro nuevas calles en lo que hoy es un descampado, y sospechan que por ahí escapan los delincuentes.

Mabel manifestó tener conocimiento de que en dos meses hubo decenas de robos. Ante ello,  el oficial principal Marcelo Coria, de la Comisaría Segunda, admitió que no todos los robos y hurtos son denunciados y que no cree que sean tantos. Respaldó su impresión con las cifras que dispone. Afirmó que durante setiembre, en toda la jurisdicción, hubo 42 denuncias y no todas eran de robos.

Específicamente sobre robos, hurtos y asaltos en el barrio Jardín San Luis, registraron tres hechos en agosto, dos en setiembre y en lo que va de octubre, dos.