Desconcierto y malestar de los usuarios por el paro de transporte

Las fiestas de fin de año significan para muchos el reencuentro con sus familias, luego de meses de trabajo, estudio u otras obligaciones que los alejan de sus hogares. Horas interminables de viaje en colectivo, los atrasos usuales, café y medialunas en terminales pequeñas como las de La Toma e inmensas como la EDIRO de San Luis capital son algunas de las situaciones que deben afrontar los viajantes cada fin de año. Toda esa rutina se vio interrumpida por el paro total del transporte interurbano, que comenzó ayer y continuará hoy durante toda la jornada. 
El clima de la terminal de ómnibus de la capital iba desde el desconcierto a la viveza para conseguir el viaje deseado. La mayoría de los pasajeros no sabía de la medida de fuerza. “Había gente esperando en la boletería, haciendo cola y recién estaban viendo si abrían", comentó Ariel Ochoa  quien venía de Maipú, Mendoza para visitar a su familia en Candelaria. A Ariel le había llegado el dato de que quizás conseguía un lugar a las 15. “Me molesta más que todo la falta de comunicación”, agregó. 
Ricardo vino de Rosario para visitar a sus hijos en San Francisco de Monte de Oro. Desde la provincia litoraleña también vinieron Víctor Leyes y Ariana Retoria. Víctor vino a ver a su familia a Quines, mientras que Ariana quería reencontrarse con su madre en Merlo. Los tres esperaban a que abriera una de las boleterías, que estaban vacías y con las luces apagadas. “Imagínate tantas horas de viaje que tengo y ahora tengo que clavarme acá”, afirmó Victor. Justo Terrazas se acerco a la misma boletería a dejar una encomienda para la localidad del norte. “La gente viene a perder el tiempo acá. No hay nadie”, dijo enojado. 
Otras tenían el cartel de “Paro de la UTA”. La solución de muchos viajantes era aprovechar los colectivos de larga distancia, que no se adhirieron a la medida y ver si los podían dejar de paso en sus destinos. Había que tener doble suerte: primero la de conseguir un lugar y segundo que pasara por la localidad deseada. “Me parece justo. Son trabajadores que están luchando por lo que se merecen. Como trabajadora los apoyo, aunque me jodan a mí”, admitió Alejandra, que esperaba poder acercarse a Merlo. Otros pasajeros itinerantes no tuvieron tanta suerte y tendrían que esperar hasta hoy para conseguir un lugar. La última opción era tomarse un taxi: afuera de la terminal en el lugar asignado para el servicio había una veintena de choferes expectantes a hacer una buena diferencia a raíz de la huelga. 
El paro es la última medida de fuerza del gremio de la UTA, en reclamo por la desvinculación de 23 trabajadores de las empresas María del Rosario y Sol Bus. Lo que comenzó como un reclamo salarial por horas extra y feriados puente, desembocó en una disputa gremial con mediaciones gubernamentales, audiencias en la justicia y la paralización de casi todo el sistema de transporte de la provincia. 

Sin servicio de emergencia
A pesar de que un día antes del paro, la UTA había asegurado a El Diario de la República la libre circulación de los colectivos para brindar el servicio de emergencia, el gremio no dejo transitar en ninguna de las empresas estas unidades. En la capital provincial, un grupo de choferes estuvo apostado en las puertas de la empresa María del Rosario, sin dejar salir las unidades, que prestan sus servicios principalmente a La Punta. "La postura de los compañeros es no dejar salir (los coches). Tenemos  trabajadores despedidos. Exigimos su reincorporación", dijo Adrián Lucero, secretario adjunto de UTA, quien agregó que se iba a decidir en asamblea si hoy también impedían  la salida de los coches de emergencia.
Ayer hubo otra mediación que fracasó, esta vez con la intervención del secretario de transporte Darío Rosas Curi. El funcionario informó que se contactó con ambas partes al mediodía, por una nueva propuesta de la empresa. El ofrecimiento no habría dejado conformes a los gremialistas y el paro continuó. "Nos preocupa la situación de los usuarios y al menos lo han entendido así las partes", apuntó el secretario sobre el acercamiento. Además recordó que el jueves se reunió con la Policía de la Provincia para reforzar la seguridad y evitar cualquier tipo de agresión a las unidades."Necesitamos que todo transcurra en un ámbito de paz social", concluyó.
Además, en la jornada falló la apelación que había presentado la UTA contra la orden judicial que exigía el levantamiento del paro. 

Los horarios de María del Rosario y Sol Bus

Hacia Potrero frecuencia de 1 hora y 30 minutos.

Hacia El Volcán cada 1 hora y 40 minutos.

Hacia El Trapiche y La Florida hay 2 viajes: uno a las 14:50 y otro a las 18:50.

Hacia La Punta cada 1 hora y 45 aproximadamente.