Productores del interior dicen que perros salvajes atacan el ganado

Los problemas para los productores ganaderos de la provincia no descansan. Mientras que todavía algunos sufren las consecuencias de los incendios, otros tienen que estar atentos a no dejar sus animales muy alejados de su propiedad, porque aparecen muertos. En Villa de la Quebrada y Paso Grande, denuncian que jaurías de perros están matando su ganado. Aseguran que cada vez pasa con más frecuencia y que pierden mucho dinero por cada animal. Las autoridades no brindan soluciones.
“Siempre encontramos que 4 o 5 perros nos matan las cabras. Hace unos días nos mataron una, y esto sucede así cada tres días más o menos”, declaró con resignación Yolanda Alcaraz, productora ganadera de Villa de la Quebrada. Aseguró que ya perdieron muchos animales, porque “cuando se alejan del campo, a veces no llegamos a hacer que vuelvan, y ahí es cuando las matan”.

"La semana pasada nos mataron una vaca preñada y un ternero de unos 200 kilos"

El mismo drama afrontan los productores en la localidad de Paso Grande, en el norte de la provincia. Afirman que son varios los afectados por el mismo inconveniente. “La semana pasada nos mataron a una vaca preñada y un ternero de unos 200 kilos. Por esos animales creo que perdimos aproximadamente unos 16 mil pesos, como barato”, relató Mauricio Villamil, productor ganadero de la zona, y agregó: “Además de la pérdida económica, esta situación le genera stress a los animales, que hace que pierdan peso. Es todo un trastorno para ellos”.
Alcaraz contó que tiene todas cabras de raza y cada una de ellas cuesta alrededor de 600 pesos. “Es plata que se pierde, y eso sin contar lo que podía llegar a producir”, declaró, y continuó: “El otro día, mi marido encontró a la jauría matando a un ternero de un campo vecino. Dice que eran 3 perros grandes y 2 más chicos”.
Osvaldo Dalmasso, productor de Paso Grande declaró: “Nuestros animales están más alejados, y los perros no llegan. Pero un muchacho que trabaja conmigo, le mataron como a 12 chivas. Es una carnicería, porque lo voltean y lo comen vivo”, además manifestó que “la situación es muy frecuente, y si sigue así, cada vez va a haber más casos”.
Aseguran que la jauría en Paso Grande sería de 7 u 8 perros, que no son de raza y que tienen pelajes bayos, negros y tobianos. “Son de acá del pueblo, y sabemos que duermen siempre en la entrada de una casa, sobre la vereda. Le hablamos al vecino, y nos dijo que nacieron con él, pero que ya no los quiere más, que los echó, pero ellos descansan ahí todas las noches”, confirmó Villamil, y además confía en que se trata de más de una jauría.
Pero en cuanto a la identificación de los animales en Villa de la Quebrada, hay más dudas que certezas. Por ahora, Alcaraz no se ha comunicado con la Municipalidad, ni con gente de otros campos vecinos, por esta situación. “Tratamos de ubicar a los perros por nuestra cuenta, ése es nuestro propósito, porque no sabemos de quién son ni de dónde vienen. Si supiéramos quién es el dueño, podemos hacer que nos paguen los animales al menos”.
Villamil sí pasó por varias instancias para que las autoridades le encuentren una solución al problema, pero en todos los casos volvió decepcionado. “La Policía no me dio ninguna respuesta, me dijeron que no podían hacer nada. A la Municipalidad también fui, pero tampoco me supieron dar una solución. Me cansé de llamar a las protectoras de animales por este tema, pero no conseguí nada”, por ello, trató de hacer algo por su cuenta a corto plazo: “Lo que hice fue alejar los animales, los cambié de cuadro. Fue la solución que busque por mi parte".
“Lo que hay que hacer acá es agarrar a los perros y castrarlos, porque si llegan a tener crías, se va a salir de control esto. Hemos hablado entre nosotros para buscar alguna solución. Algunos dicen de matarlos, pero tampoco podés matar un perro porque los de protección animal te hacen un sumario”, opinó Dalmasso. En el Ministerio de Medio Ambiente afirmaron que es una situación que los excede y que son los municipios los que deben encargarse.