La Iglesia apoya que cierren los supermercados el domingo

Si bien la Iglesia está para el orden espiritual y para la salvación de las almas, también apoya todo lo que refiere a la dignificación de la persona y al bien de la familia. Por eso estamos a favor del descanso dominical”, resumió el sacerdote y vocero del Obispado, Alan Sosa Tello. Con sus palabras, respaldó el voto positivo del clero puntano, al proyecto que busca que el personal de los súper e hipermercados, de toda la provincia, ya no trabajen el último día de la semana. Dijo que los trabajadores merecen tener más tiempo para estar junto a sus seres queridos y también para descansar. 

En 2015 el proyecto de ley de descanso dominical fue presentado a los legisladores por la Asociación de Propietarios de Locales de Villa Mercedes. A la iniciativa se sumó la Cámara de Comercio y el Sindicato de Empleados de Comercio de San Luis.

La iniciativa que la Iglesia apoya tomó forma en 2015, cuando el proyecto de ley fue presentado a los legisladores por la Asociación de Propietarios de Locales de Villa Mercedes. También se sumó la Cámara de Comercio y el Sindicato de Empleados de Comercio de San Luis. El anteproyecto contempla el cierre de grandes negocios, que superen una determinada cantidad de metros cuadrados y que tengan varios empleados, como los supermercados e hipermercados. Las excepciones son los locales que incluyen la gastronomía y todo lo relativo al turismo. Con el pasar del tiempo lo que era una utopía reunió más fuerza. Ahora el proyecto está en manos de la Comisión de Comercio e Industria de la Cámara de Diputados, que hace unos días le pasó una copia a distintos sectores sociales, para analizar el escrito punto por punto. La idea es enriquecerlo desde diferentes visiones. “Estuvimos en una reunión junto a la Cámara de Comercio, el Municipio, y algunos gerentes de supermercado. También algunos gremios y otros cultos. Desde nuestra parte nos pareció bien el texto. Apoyamos el espíritu de la ley, para que los trabajadores tengan un espacio de recreación, y para que aquellos que profesen la religión acudan al culto”, destacó Tello. 
Ni el sacerdote, ni Vito Carmosino, el presidente de la Cámara de Comercio, quisieron decir cuáles fueron las sugerencias que emitieron. Lo que si dijeron es que en unos días devolverán los resultados a la comisión. Si es aprobado,  pasa al recinto de Diputados y de ahí al de Senadores. 
“Las grandes superficies seguramente mostrarán su oposición, porque no ven más allá de sus propios intereses y desatienden la parte humana”, apuntó el comerciante. También dijo que hay que concientizar a los compradores para cambiar sus hábitos a la hora de elegir el domingo para hacer sus compras. Y en eso tuvo razón, aunque lo números en un principio apoyan la medida. En una encuesta realizada por El Diario de la República durante 2015, el 56 por ciento de los casi 700 votantes se inclinó por el descanso, mientras que un 30 por ciento eligió la opción de que haya atención pero con jornada reducida. El resto manifestó que no está a favor del cierre. 
Para algunos sectores, el cierre dominical tendría un impacto directo en rubros y comercios ligados a los grandes centros comerciales, como el transporte, las remiserías y los shopping , ya que las compras de fin de semana son, en muchos casos, una salida familiar. Sin olvidar los puestos de trabajo de los “franqueros”, los empleados que sólo trabajan para dar descanso a los trabajadores permanentes. Carmosino sostuvo que la clave es la organización. “Si el consumidor sabe que el comercio abre de lunes a sábado, va a disponer de su tiempo para comprar en esos días. Lo que va a hacer que durante esos días, haya más gente en los súper, y por lo tanto abran más cajas de atención, donde perfectamente pueden poner a los trabajadores que sólo acuden en domingo. Lo mismo vale para los repositores”, explicó.