Puntanos en España en contra y a favor de la decisión catalana

Puntanos y otros argentinos que viven en España están en plena jornada laboral durante la tarde pero no será una noche tranquila para ellos. Cataluña declaró este viernes la independencia y España decidió la intervención. Esta decisión, que pone a Europa en la boca de todos dentro del plano político, toma de un lado y del otro a los argentinos que eligieron quedarse en España.

La puntana Patricia Attwell hace 10 años vive en Benidorm, a 500 kilómetros de Cataluña. "No sé cómo lo van a resolver a nivel político, pero fuera de Cataluña consideramos que esto no debería haberse pedido. Estamos en contra de que se independice. Pueden tener ese sentimiento de necesidad de República pero existe una ley de los reinos de España que debe cumplirse".

Attwell, de 40 años, comparó este panorama actual con un ejemplo: "Es como si Misiones y Entre Ríos un día quieran separarse rememorando la historia antes de la independencia argentina. No es tan sencillo legalmente".

Con paciencia, observó el nuevo mapa político y consideró que ambos bandos "pierden" con esta decisión. "Cataluña es un territorio que le da mucho a España, aporta mucho económicamente y en otros sentidos. En Cataluña piensan que pueden mantenerse por sí mismos y que van a estar mejor, pero no veo como lo van a mantener realmente. Hay muchos gastos que los cubre el Estado Español", opinó y recordó que desde el 1º de octubre, tras el referéndum, miles de empresas se fueron a otras provincias españolas.

"Es un manejo político del presidente catalán. Ayer (por el jueves) quería pedir elecciones y ahora saltó con la independencia. La Unión Europea no avala esta decisión. Sin embargo, de concretarse, deberán fabricar su moneda. Es muy complejo, creo que se tiraron a una pileta", sentenció.

Mientras que Miguel Ángel Martínez Díaz recordó que "los impulsores de esta idea fueron los partidarios de la izquierda populista" y que "hace bastante tiempo la sociedad catalana quiere independizarse". Hace 30 años vive en Vigo, en la región de Galicia, en la zona oeste de España.

"Si hay independencia pierde Cataluña. Se fueron las empresas, que pusieron sedes en España. Ellos pagan tributos a España. Ahora Cataluña va a quedar fuera de la Unión Europea y para vender sus productos debería hacer un acuerdo con ellos. Es una suerte de boicot oficial", opinó.

Para Martínez Díaz la industria de España perdería a sus máximos referentes pero quedarían opciones para reemplazar a esos productores y se volverían fuertes de esa manera. Criticó al presidente de España, Mariano Rajoy, por la pasividad para resolver el conflicto cuando todo era un rumor a voz abierta.

El otro lado

Juan Pablo Torres, de 43 años, es un argentino que vive hace 14 años en Barcelona. Su postura es catalana hasta la médula.

"Estoy de acuerdo con la independencia porque hay muchos factores culturales, el idioma es fundamental, y concepciones de cómo hacer las cosas y los proyectos progresistas. La mentalidad catalana es más abierta y eso hace legitimo el pedido del gobierno", dijo.

"También es importante la cuestión administrativa, de ingresos por ejemplo, y la devolución de las tasas. Hay una disparidad enorme y, claro, aquí se pagan muchos impuestos y se recibe poco por parte del Estado Español como infraestructura. En Madrid y otras partes de España se han construido carreteras enormes que nadie transita y aquí hace 15 años intentamos hacer un puente que une dos autopistas. Contamos con la mayor cantidad de peajes y tuvimos que recurrir a capital privado para poder tener las autopistas. España no realiza las inversiones", comentó sobre algunos de los matices de por qué está a favor de la decisión del gobernador regional catalán, Carles Puigdemont.

Torres sostuvo que es importante mantener el idioma y el sistema de educación catalán, que tildó de "excelente". "España lo ha bombardeado y hay que vivir acá para entenderlo. Para el catalán mientras más idiomas se aprenden, mejor. En España dicen que se persigue al castellano pero jamás tuve un problema. Siempre están abiertas las puertas para aprender catalán de manera gratuita. Vas a cualquier sitio y lo aprendes. Si yo no lo he hecho fue por decisión mía", concluyó.