Los televisores de tubo que están en la pila para descarte pueden volver con esplendor al living de la casa. Porque un pequeño aparato puede permitir ver las series de Netflix, HBO o Yomvi y YouTube, y dejar de lado la pequeña pantalla de la tablet.
Los televisores convencionales vienen equipados con el puerto HDMI, un conector que data desde el 2003 y que se convirtió en el estándar en la transmisión de audio y vídeo en las teles actuales. La llegada de este nuevo estándar dejó obsoletos a los televisores anteriores, incluso a algunos de pantalla plana y de mucha calidad, pero anteriores a 2003.
Con el Chromecast (de 800 a 1.300 pesos en las tiendas de internet), la vieja tele se incorpora en una categoría superior en la que podremos disfrutar de YouTube o los nuevos servicios de series como Netflix, HBO o Yomvi.
Con el conector y un dispositivo del estilo del Chromecast es posible transmitir el contenido del móvil o de la tableta al viejo televisor, es decir, no solo se pueden reproducir vídeos de YouTube, sino que, además, si se tienen contratados servicios de televisión a la carta, estas emisiones pueden ser transmitidas al viejo televisor.
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