Seguros para sortear el "último adiós"

Las funerarias brindan un seguro de cobertura para que la muerte no alcance desprevenidas a las familias. En Amemoriales se puede pagar por mes para tener cubierto todo ante lo inesperado. "Las afiliaciones son por grupo familiar de dos a cinco personas y vale 400 pesos por mes y hasta nueve son 450 pesos. Con esto lo único que paga la gente es el traslado en el momento", dijo el gerente de ventas, José Jofré . 

Comentó que hace un tiempo que están sacando tanto de los cementerio municipales como de los privados, fallecidos para cremar y desocupar lugares. "La gente decide para dejar de pagar el nicho y el mantenimiento y así se liberan de todo. Estamos dando una buena opción, con un precio más o menos accesible y si lo hacen sin velatorio por ahí le baja el precio, también porque hay gente que no quiere velar, muchas veces por el cansancio de haberlo cuidado mucho tiempo y cuando pasa lo que tiene que pasar deciden directamente llevarlo a cremación", expresó.

Los Álamos por 500 pesos aceptan todo el grupo familiar sin límite de integrantes. "Tomamos los padres propios y políticos del afiliado y los hijos sin importar la edad. Por este valor se incluye el sepelio, cementerio o cremación", confirmó Deluret. Advirtió a la gente que PAMI no tiene cobertura de sepelio. "Por ahí los familiares se confían y creen que se los paga la obra social, pero lo único que ellos dan es un subsidio por unos 6 mil pesos y es muy poco", manifestó.

¿Por qué no hay crematorio en San Luis?

El socio gerente de Los Álamos, Pablo Deluret, comentó que hace unos 10 años inició un proyecto para instalar un crematorio en San Luis. "Sería para sumar una unidad de negocio más, aunque no es tan redituable", señaló.

El proyecto quedó trunco porque la provincia adhirió al Protocolo Internacional de Kioto que tiene normas estrictas referidas al cuidado del medio ambiente. "Esta norma solo permite que se instale un crematorio internacional que tiene un sistema de tres cámaras de filtración de los gases que emana el horno a diferencia de los nacionales que tienen solo dos. El internacional cuesta alrededor del millón y medio de dólares, el nacional hasta hace poco salía un millón y medio pero de pesos. Es mucha la inversión y no se vería recuperado en el corto plazo", analizó.

Otro inconveniente que tiene la instalación de un horno internacional es que según explicó Deluret, no hay técnicos en Argentina que puedan instalarlo y que además logren tomar las muestras que certifiquen que la emanación de gases es la aprobada por esta norma internacional.

"Conviene más cremar en otras provincias", concluyó.