Los jóvenes que huían con 100 mil pesos tenían un inhibidor de alarma

Los efectivos de la Dirección General de Investigaciones averiguan el origen de los más de 100 mil pesos y de un inhibidor de alarmas que les secuestraron anteayer a dos jóvenes en un procedimiento realizado por efectivos del Comando Radioeléctrico en San Luis capital. Ayer al mediodía, en presencia de dos testigos, los policías constataron que el dispositivo del que se incautaron efectivamente anula la señal del sistema de cierre centralizado de vehículos, lo que permite abrirlos sin ejercer violencia. Los investigadores presumen que los sospechosos, junto a otros dos hombres que se fueron del lugar, tal vez obtuvieron el dinero utilizando el inhibidor para abrir algún rodado, por lo que la plata podría ser producto de un delito.

De todas formas, el comisario mayor Roberto Molina le informó ayer a El Diario que por el momento los arrestados, Catherin Miranda y Ezequiel Contreras, están imputados por dos delitos, resistencia a la autoridad y procedencia de elementos. Esto último es en relación a dos teléfonos y a los 108.100 pesos que los efectivos hallaron tirados en el patio delantero de una casa ubicada en Alberdi, entre Esteban Agüero y Presidente Perón.

Hasta ayer, en ninguna de las comisarías de la capital se había denunciado el robo de una suma similar a la que tenían los detenidos. De todos modos, los policías hicieron las diligencias para obtener registros de las cámaras de seguridad y tratar de establecer cuál fue el desplazamiento que tuvo, previo al procedimiento, el Fiat Siena en el que iban Miranda y Contreras junto a las dos personas que se fueron.

Según refirió Molina, el Comando Radioeléctrico hizo la primera intervención, después de que un hombre realizara un llamado telefónico al 911, refiriendo que había visto que los ocupantes de un Fiat Siena estaban en actitud sospechosa, en la avenida Lafinur y Las Heras. Quien llamó dio la patente del rodado.

Molina no supo precisar cuál fue esta actitud sospechosa que vio ese hombre. Pero sí indicó que los agentes del Comando comenzaron una búsqueda para dar con un automóvil como el señalado.

En avenida España y Presidente Perón lo localizaron. Contó que le dieron la voz de alto al conductor y que el auto paró a la vuelta de esa esquina, sobre Perón. Bajaron cuatro personas, tres hombres y una mujer. Pero “lo único que pudieron hacer los policías fue identificar al conductor. No pudieron hacer lo mismo con el resto, porque dos se dieron a la fuga”, explicó. Son quienes iban sentados en el asiento trasero del Siena, Miranda y Contreras, que corrieron en distintos sentidos.

“La chica fue por Perón hacia el norte, y fue detenida en el cruce de esa avenida y la autovía Eva Perón”, detalló. Ella era quien tenía encima el inhibidor de alarmas. Contreras fue aprehendido en la calle Alberdi.

El joven fue reducido casi al lado de Vittal, el servicio privado de emergencias médicas. Permaneció boca abajo, cerca del cordón de la vereda, con una de las muñecas esposada a un tobillo, justo frente a la vivienda en cuyo patio delantero hallaron una campera en la que estaban envueltos los billetes. “En ese momento no estaba el dueño de la casa. Hubo que esperar a que llegara. Ahí los efectivos pudieron entrar y ver la prenda en la que estaba la plata”, relató.

Miranda es vecina del barrio Eva Perón y Contreras reside en el Juan Gilberto Funes. Ninguno de los dos tiene antecedentes, pero el joven ya tiene una causa, que también fue instruida por Investigaciones. “Fue por la procedencia de un vehículo. Hace unos meses, se interceptó un rodado que estaba en fuga. Resultó que está inhibido por tener chasis y motor adulterado”, recordó.

Un neutralizador de señal

Ayer, con un vehículo con cierre centralizado que fue prestado por un muchacho y en presencia de dos testigos, los efectivos hicieron una pericia para establecer si el aparato secuestrado a los jóvenes era efectivamente un inhibidor de alarmas, y confirmaron que así es.

“El handy se enciende. Tiene dos perillas, una de volumen y otra correspondiente a los canales. Tiene 16 canales, y se hizo prueba con cada uno de ellos. Cuando se posiciona en el canal 1 y se presiona la perilla antes que la persona accione el botón para el cierre centralizado del auto, se logra inhibir la señal que el propietario del auto le da al cierre centralizado”, resumió el comisario mayor Molina.

Si bien estos artefactos pueden adquirirse por internet, “es necesario que alguien que tenga algún conocimiento de electrónica haga un circuito cerrado dentro de ese dispositivo”,   para usarlo con este fin, explicó.

Dijo que, según lo que han estudiado, quienes utilizan este tipo de aparatos para abrir autos y luego hurtar esperan hasta divisar a algún conductor que está por estacionar, y ahí activan el inhibidor. Para ello, deben  ubicarse a menos de 70 metros del auto.

El comisario mayor Molina recomendó utilizar los dos sistemas de seguridad que tienen los rodados, esto es, la activación del cierre centralizado —que tiene un click característico— y luego colocar la alarma, que también hace un sonido particular. “Si la alarma no suena, es porque el auto está inhibido”, dijo.