Una parte de Despelotango gira por Merlo
Los dos fundadores de la orquesta que combina tango y murga pasean por Merlo con bombo y bandoneón.
Picarescos y aventureros como la primera vez que cruzaron palabra en una estación de colectivo en el conurbano bonaerense, Abel Momo y Nicolás Tognola fueron leales a sus principios y dejaron el caldeado Buenos Aires por unos días para darle lugar a la gira "Catereté", que los trajo por San Luis con sus instrumentos. El dúo forma parte de la orquesta milonguera y murguera Despelotango, que cuenta con 11 integrantes y que dejó partir a dos de ellos para que los represente en una porción de la Argentina.
Nicolás y Abel llegaron esta semana a la Villa de Merlo y ya se presentaron en varios lugares de la localidad y zonas aledañas. Hoy es el turno de escucharlos en el teatro Amigos de Merlo, a las 20:30, en un espectáculo en el que compartirán cartelera con la Agrupación Típica Pan Casero, Leonardo Massone y Juan Carlos Trigo Burgol.
Como a la mayoría de los artistas del país, el 2020 golpeó duro a los miembros de la orquesta. Tras un año de incertidumbre, llegó el verano y el despegue era necesario para la dupla que creó la agrupación hace 18 años. Los demás músicos de Despelotango aceptaron con alegría el viaje de sus compañeros y los esperan ansiosos para presentar el próximo disco que saldrá en los próximos meses.
En Merlo, los músicos encontraron colegas, lugares culturales para sus canciones y mucha naturaleza que los inspiró a grabar videoclips. El objetivo de este formato reducido de Despelotango es "plantar una semilla musical en la región y encontrarnos con otros músicos que quieran formar una orquesta paralela para que toquen con nosotros en las próximas visitas", explicó Nicolás, el bandoneonista.
Junto con Abel, quien toca el bombo y el platillo, Tognola representa la esencia de Despelotango, la fusión de la murga y el dos por cuatro. Los músicos supieron mezclar los géneros que en los principios de 1900 también marcaban un estilo particular. "Sentimos que dentro de nuestros instrumentos se encuentra todo lo que necesitamos para interpretar el repertorio que seleccionamos. Extrañamos a nuestros compañeros porque le dan la cuota de adrenalina que nos falta, pero el público al escucharnos siente el sonido popular que identifica a Buenos Aires, el lugar de donde provenimos", agregó Tognola.
El grupo recrea viejos clásicos de la música popular argentina, como canciones de Ángel Villoldo, considerado el padre del tango, quien le dio la cuota de picardía y humor que con el tiempo mutó en drama y desamor. Con un sonido fresco y desfachatado, la orquesta presenta expresiones rítmicas muy diversas que van desde murga, candombe, milonga y folclore hasta cumbia, características del espíritu festivo y popular de toda la cuenca del Río de la Plata.
"El proyecto trata de devolverle a la murga la alegría y la armonía, y al tango, el beat de la percusión. Nosotros veneramos esa esencia de tango picaresco con una impronta orquestal pero con una puesta en escena que pasa por lo popular de la murga", explicó Luciano Rosini, cantante de la orquesta que quedó en Buenos Aires a la espera de sus compañeros.
Mientras tanto, Nicolás expresó que su estadía en la provincia fue divertida. Encontraron muchas familias y amigos entusiasmados con la propuesta. "Estamos muy contentos por el viaje a tierras puntanas y queremos regresar pronto. La alegría que se propuso en cada concierto se contagió al público que nos esperó muy respetuosamente en cada punto donde nos presentamos", agregó Tognola, quien seguirá su rumbo junto a Abel por Córdoba y Santa Fe. La dupla también está acompañada por Almendra Bogado en audiovisuales y Ariel Guanuco en la parte técnica.
DÍA: Hoy
HORA: 20:30
LUGAR: Teatro Amigos de Merlo, Presbítero Becerra 540
ENTRADA: A la gorra
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