La Toma: los usuarios reclaman un mejor servicio de transporte

Viajar desde La Toma hasta Villa Mercedes, y viceversa, puede resultar una verdadera odisea para los usuarios del servicio regular de transporte interurbano, específicamente el que brinda la empresa Panaholma. Según los pasajeros cotidianos, es costumbre viajar apretados y permanecer parados durante la hora y media de trayecto.

"Pedimos a los usuarios que tuvieron problemas que se comuniquen con nosotros”

“No tengo nada contra los choferes, al contrario, me dan lástima porque están en el medio por defender a la patronal. Viaja mucha gente parada, mujeres con niños, entonces me pregunto, ¿y si se matan en la esquina? Me parece que desde la boletería también hay mucha culpa porque si no tienen lugar, que no vendan pasajes”, dijo  Selva Muñoz, dueña del quiosco de la terminal de la localidad. 

Son muchos los observadores diarios de la incómoda desventura de viajar amontonados y parados. Pasajeros que deben bajar de los ómnibus cuando se aproxima un control y vuelven a subir unas cuadras después.

“Mis informes comprueban que el colectivo de la empresa Panaholma sale súper lleno hasta el último escalón. Según pude contar eran 26 personas paradas. Alertada, llamé a la Comisaría, pero me dijeron que no tenían móviles, entonces escribí en el informe que esto sucedía el 17 de febrero a las 15:21. De hecho esta mañana (por ayer) mi compañera elaboró otro informe en el que otro colectivo iba con exceso de pasajeros”, explicó Raquel Escudero, quien trabaja en Seguridad  Comunitaria de La Toma, y agregó: “La inspectora de tránsito no dejó salir al vehículo con pasajeros parados, los hizo bajar y a la vuelta de la terminal se subieron todos de nuevo, un aspecto que también figura en las libretas. Parece que son instrucciones del dueño de Panaholma, pero eso no lo sabemos”.

La hija de Mónica González, una de las usuarias del servicio,  tiene que viajar diariamente desde La Toma hasta Villa Mercedes para estudiar.

“Teníamos el número de asiento de la ida y de la vuelta porque sacamos el boleto a la mañana temprano. Cuando le preguntamos si era correcto que estuviera ocupado por otra persona el chofer contestó: ‘¿Qué quiere que haga?’. Yo quería asegurarme de que mi hija volviera, entonces le pregunté si paraba en la Universidad y no me brindó información, no me respondió nada”, dijo González, quien ya consiguió un remis y está tranquila.

Pero esa no es la solución. Selva, la dueña del quiosco, propone una: “Ya que es muy malo el sistema de Panaholma y que no se puede, ni debe llevar a la gente como si fueran animales, tiene que haber más frecuencias y más colectivos porque los que hay quedaron muy chicos, a lo mejor con un colectivo más grande funcionaría todo bien, pero tiene que mejorar, así la gente no puede viajar”.

Víctor Cianchino, jefe del Programa Transporte Para Todos, se enteró por un llamado de El Diario sobre la inseguridad a la que son sometidos los vecinos de La Toma, cada vez que desean salir de la localidad.

“No recibí informes de ninguno  de los jefes de inspectores de San Luis, Villa Mercedes, San Francisco y de La Toma, y no tuve esa novedad. Tampoco reclamos de los usuarios, de todas formas me voy a comunicar con los inspectores para saber si están en conocimiento y ver qué está pasando”, dijo Cianchino. Sin embargo, María Rivarola, la inspectora de la terminal de La Toma dice que sí han hecho actas.

“Le pedimos a los usuarios que tuvieron estos problemas que por favor se comuniquen con el programa y pidan hablar conmigo para solucionar este problema y formalizar el acta de reclamo de infracción”, explicó el Jefe de Programa Transporte y proporcionó los canales de comunicación que deberán utilizar los usuarios para realizar los reclamos.

Hay que llamar al 4452000 interno 3172/ 3168 /3172; o llegar hasta cualquiera de las terminales de San Luis, Villa Mercedes y Merlo; o directamente a través del correo electrónico micmyt@sanluis.gov.ar.