Hoy es un día crucial para tres hermanos de Tilisarao, sospechosos por el homicidio de un anciano asesinado el sábado a la madrugada durante un asalto en su casa rural de Las Lagunas, del Departamento San Martín. La jueza Penal de Concarán, Patricia Besso, va a resolver si los envía a la Penitenciaría por el asalto a una estancia del Valle del Conlara, cometido el viernes a la noche.
Por orden de la jueza Besso la Policía mantiene secuestrado un Chevrolet Corsa gris de un amigo de los Torres.
Para Walter Alexis Torres, de 21 años, Wilson Yael, de 23, y Jairo Iván, de 27, la decisión de la jueza no sólo entraña la posibilidad de caer en la cárcel por primera vez. También será un síntoma de que les va a costar salir de allí. Hay pruebas según las cuales los autores del asalto en la estancia “La Ramada” son los mismos que seis horas después entraron a los tiros en la casa de Las Lagunas, donde mataron a Pablo Hipólito Ávila, de 76 años.
La escopeta con la que el anciano fue asesinado sería una de las tres calibre 16 que habían robado junto a un rifle calibre 22, un celular y una motosierra en “La Ramada”, en la ruta 40, a cuarenta kilómetros de Tilisarao, entre Renca y Potrerillos.
Allí irrumpieron delincuentes armados con cuchillos. Eran las ocho de la noche del viernes. Amenazaron a la dueña y a un cuñado que sufre de epilepsia.
El lunes la jueza Besso llamó a los hermanos Torres a declarar en indagatoria por ese robo calificado por el uso de armas y por ser cometido en despoblado y en banda. Pero se abstuvieron de declarar, le informó a El Diario el defensor oficial de los tribunales de Concarán, José Luis Guiñazú, que los asistió en la audiencia.
En las viviendas de los sospechosos, allanadas el domingo, la Policía halló las armas robadas de “La Ramada”.
Los investigadores comprobaron que una de las escopetas tiene manchas que podrían ser de sangre. Podrían ser un indicio de que ésa fue la que usó uno de los delincuentes para pegarle un culatazo a Pablo Ávila, después de dispararle en la ingle.
El hombre murió desangrado por el tiro mientras su esposa, Alcira Ramona Velázquez, de 74 años, herida de refilón por un disparo en el muslo derecho, trataba de llegar a lo de su cuñado, Roque Ávila, a cinco kilómetros de su casa, a pedir ayuda.
El resultado de los análisis bioquímicos sobre las manchas en el arma tal vez esté a fines de esta semana. Pero los investigadores esperan que otras pericias estén terminadas antes, informó ayer el subjefe de la Unidad Regional 3 de Policía, comisario inspector Oscar Contreras.
Es probable, dijo otra fuente, que hoy, mientras la jueza defina si procesa a los Torres por el asalto en “La Ramada”, lleguen al juzgado los resultados de algunas. Cuando elaboraban las conclusiones de sus trabajos, los peritos les anticiparon a los investigadores que varias huellas ubican a los Torres en el campo donde mataron al anciano.
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