Un video con la recopilación de los mejores besos de la historia del cine (está el de "El hombre araña" y el de "Casablanca") al ritmo de diferentes versiones de "Bésame mucho" abrió la noche de "Los Cedros". Luego entró la banda estable del café concert, "Xanluisxéntricos", que arremetió con la continuidad del tema y otros del antiguo cancionero.
Homenaje a Broadway en "Los Cedros".
Pero el espectáculo central de las noches del viernes y el sábado lo dieron cuatro jóvenes artistas que, en sus voces y en sus pasos, repasaron los clásicos musicales de Broadway. La puntana Ivana Woscoboinik, la bellísima Julieta Nair Calvo y los versátiles Kevin Mansilla y Pedro Frías hicieron un show especialmente armado para el escenario de "Fetiche", el restó de "Los Cedros".
El primero en salir a escena fue Mansilla y su demostración del tap, un estilo directamente relacionado con "Chicago", la obra que fue visitada de inmediato en la voz de Julieta con "Que siga el jazz".
Sin demasiado tiempo para la recuperación, Ivana tomó la posta con "Cabaret" -el segmento del musical homónimo-. En pocos minutos, dos clásicos del género ya habían desfilado por la noche.
Mansilla, por su parte, hizo su presentación cantada con "Hoy es el día", un lindo recuerdo del olvidado musical de "Dr. Jekyll y Mr. Hyde" y luego le dejó el lugar al dúo de Frías y Nair Calvo para una versión bilingüe de "Garota de Ipanema".
Frías tendría su momento de ir al frente con "A mi manera", con los coros de sus tres compañeros detrás.
La agilidad del show no sólo se evidenció en el constante cambio de protagonistas sobre el escenario, sino también en el vestuario. Así como fue totalmente negro en el inicio, tuvo una variación a los oscuros a poco de comenzar; se puso colorido con vestidos largos en la segunda parte y terminó con la informalidad.
Luego de un breve intervalo, el espectáculo propuso un recorrido por clásicos de Disney. Ivana tuvo su parte solista; Julieta demostró la dulzura de su voz en "Quiero vivir fuera del agua" -acaso la canción más esperanzada de "La sirenita"-; el dúo de Frías y Woscoboinik se animó a "Un mundo ideal", de "Aladdín", y Julieta y Kevin recordaron a "La bella y la bestia".
El bloque final tuvo otra temática que lo atravesó. Los cuatro integrantes del elenco se reunieron nuevamente sobre el escenario e hicieron canciones de ABBA.
El punto máximo fue "Mamma mía", que curiosamente también tuvo su musical en calle Corrientes y del que Julieta fue parte destacada. En esa parte todos los artistas mostraron sus dotes para el baile.
El espectáculo presentado como un homenaje a los musicales de Broadway quedó mejor saborizado con un exquisito estofado campero o con las sabrosas empanadas que tienen la marca registrada de un cocinero de primer nivel. Todo, regado con un vino invitación de la casa que el propio anfitrión, Alberto Rodríguez Saá, se encargó de servir mesa por mesa.
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