Cara a cara con Yohana Alfonzo: "Busco pelear ante las mejores"

Siempre busco pelear ante las mejores, me gusta demostrar que tengo garra y corazón arriba del ring”. Ésas, fueron las palabras que utilizó Yohana Alfonzo, para definir su apetito por enfrentar a rivales de jerarquía sobre el cuadrilátero. Con apenas veinticuatro años, la “Leona” se convirtió en la primera mujer de San Luis en alcanzar el título nacional, y en escribir su nombre, en los libros de historia del deporte villamercedino.

Su sueño: ser campeona del mundo en la categoría.

Aún con rastros de golpes visibles sobre su rostro, hematomas en su hombro derecho y gestos de fatiga muscular propios de la contienda, Yohana, abrió gentilmente las puertas de casa a El Diario de la República; para analizar la batalla ante la salteña López, hablar de sus sueños y contar sus inicios en el boxeo profesional.
“López tenía mucha experiencia. Venía de disputar el título Sudamericano. Trabaja muy bien los golpes directos, yo sabía que no tenía que quedarme parada, porque si no iba a sufrir mucho desgaste. Por eso, ideamos una estrategia: pegar y salir; y creo que dio sus frutos. La mayor diferencia, estuvo en que yo peleé por primera vez a diez rounds”, mencionó Alfonzo al inicio de la charla.
“Tuve buen resto físico, no me sentí cansada y las piernas nunca me abandonaron. El día del combate yo estaba muy tranquila. Recé mucho antes del combate, eso me ayudó a calmar la ansiedad. Subí al ring con auriculares, para no sentir la presión del público. Lo más importante para mí, es que nadie me regaló nada. Mi rival no fue un ‘paquete’”, señaló la nueva campeona Superpluma, en un tono de voz que denotó firmeza.
Para Yohana, sólo una palabra resume mejor su éxito deportivo, y ésa es: esfuerzo. “En este deporte hay que tener mucha fortaleza. A veces el cuerpo está fatigado, con muchos dolores y sabés que hay que seguir adelante. La disciplina y la constancia son dos pilares fundamentales del boxeo. Cuando uno ya es profesional debe cuidarse en todo: comidas, horarios y reuniones; porque lo único que importa son las metas. Ahora , ya estoy mentalizada en ir tras la corona sudamericana”, dijo.
En cuanto al amor encontrado en el mundo de los guantes, la “Leona” recuerda que “tenía 16 años, cuando mi papá me llevó por primera vez a un gimnasio. Mis tres hermanos -Jesús, Jairo y Cristian- practicaban boxeo. Yo hacía patín, pero mi papá me decía que era un deporte lindo. Finalmente me convenció, dejé los patines, comencé y se convirtió en mi pasión”, recordó emocionada.
Si bien, mamá Rosa (54) y papá Ángel (55), son los pilares fundamentales de su carrera profesional, Yohana, se emociona hasta las lágrimas cuando recuerda a su abuela Clotilde, a quién extraña incansablemente en su día a día. “Cuando yo empecé a boxear, mi abuelo no me vio pelear. Y mi abuela me acompañó a todos lados, siempre estuvo a mi lado, y en febrero cuando faltaba poco para presentarme, ella falleció. Por eso, el video del final, porque yo quería que ella estuviese de alguna manera presente”, contó con tristeza.
Párrafo aparte y sin querer olvidarse de nadie, Lucas Villegas -entrenador y novio-, presente a su lado; también tuvo su propio espacio de agradecimiento. “A Lucas, lo conozco desde que éramos pequeños, porque íbamos a la misma iglesia y él es amigo de mi hermano Jairo. Con el tiempo nos pusimos de novio y empezamos a entrenar juntos hasta ahora. Él tiene mucho que ver en mis logros, me acompaña siempre y juntos cumplimos los objetivos”, dijo la “Leona”.
Mientras que como buena campeona, de movimientos rápidos en su cintura, esquiva tanto los golpes como el compromiso formal. “No, es muy temprano para hablar de matrimonio. Todavía no hemos planificado esa pelea”, finalizó entre risas.