El jefe de Gabinete de la Nación, Jorge Capitanich, insistió este viernes en que el gobierno de Cristina Kirchner tiene "voluntad de evaluar" una eventual reforma del piso del Impuesto a las Ganancias, que deben pagar los trabajadores pero relativizó el impacto de este gravamen al mencionar la cantidad de operaciones de compra de dólares que realizan los trabajadores en relación de dependencia.
Versiones hablan de que la próxima suba estaría entre el 25 y el 28%.
La suba del mínimo no imponible para el pago de Ganancias es uno de los motivos del paro general convocado por la CGT de Hugo Moyano para el 10 de abril.
La del viernes fue la tercera intervención de Capitanich en la semana referida a una posible modificación del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias a la cuarta categoría, la que incluye a los trabajadores.
El martes pasado, en réplica a los pedidos de sindicalistas y políticos opositores, sostuvo que no estaba "en análisis" un cambio en el tope fijado en agosto del año pasado, por el que quienes cobran un salario bruto de 15 mil pesos mensual o más están sujetos a los descuentos por ese impuesto.
Pero el jueves, en su informe en Diputados, cambió de dirección y transmitió un mensaje de "la Presidente de la Nación" , en el sentido de que el Gobierno tiene "en estudio" una posible actualización.
Varias versiones periodísticas ya mencionan números del posible aumento del mínimo que decidiría el Gobierno: algunos dicen 25%, lo que llevaría el piso a los 18.750 pesos; otros arriesgan una suba de hasta el 19%, que dejaría el mínimo en 19 mil pesos.
Capitanich adelantó que el análisis que debe realizar el Gobierno "tiene que ver con la estructura impositiva de las personas físicas y los niveles de deducción".
Pero luego el jefe de Gabinete relativizó el impacto real de la quita por Ganancias a los salarios de los empleados registrados, por las compras de moneda extranjera que éstos hacen.
"Las operaciones para tenencia de moneda extranjera alcanzaron hasta ayer el número de 976.860, validadas por la Afip, por un monto de 548,6 millones de dólares; de ellas, el 88,3% constituye (operaciones hechas por trabajadores) en relación de dependencia, de los cuales 64,9% del sector privado, y 35,1 del sector público", precisó el funcionario.
Pese a la "chicana dolarizada", insistió: "Tenemos la voluntad de analizar estructural y precisamente cada una de estas iniciativas, para evaluar claramente la estructura de ingresos, el costo y el alcance fiscal, y si estas deducciones afectan el ingreso neto de cada uno de los trabajadores en relación de dependencia, monotributistas o autónomos".
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