Decir carnaval, es sinónimo de fiesta. Decir Carnaval de Río significa algo muy diferente, es viajar de modo automático a la gran fiesta que sucede en Brasil. Tener toda esta fiesta en San Luis es una enorme tentación para muchos turistas, que llegan cada vez en mayor número para experimentar tres noches de un universo de danzas, asombros y sonrisas. La mezcla exacta del talento local, con la profesionalidad de las escolas do samba brasileras.
La mayoría de los visitantes son de provincias vecinas como San Juan, Mendoza y Córdoba. También vienen de Buenos Aires, Neuquén, Santa Fe y hasta viajeros que llegaron desde el fin del mundo, Ushuaia, interesados por esta magnífica fiesta carnavalesca y por el consejo de personas que ya estuvieron en las tribunas del sambódromo
“A mitad de camino se nos rompió el auto y nos trajo a tiro un camión, llegamos al hotel y nos cambiamos en el taxi camino al sambódromo. Vimos por internet la propuesta y realmente superó ampliamente lo que esperábamos”, contó entre risas Nicolás, junto a Yamila, Agustín y Soledad, de Neuquén.
"Somos del Centro de Retirados de Policía de Tierra del Fuego, vinimos a acompañar a la esposa de un ex compañero de la fuerza luego de haber compartido casi treinta años de servicio juntos. Él regresó con su mujer a Mendoza y siempre nos instó a venir a esta increíble muestra de lo más parecido al inigualable carnaval de Río de Janeiro. Estamos felices, por todo el viaje, los paisajes son increíbles y el asombro es permanente. San Luis y su gente no tienen igual en toda la República”, manifestó exaltada María Eugenia junto a sus colegas: Jorge, Mónica, Eduardo, Junior y Adriana. Para ellos los miles de kilómetros recorridos tuvieron su recompensa.
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