En los últimos cinco días, el agua cayó del cielo pero no de donde la mayoría de los vecinos de Concarán imploran y esperan que caiga que es de la canilla. Un desperfecto en una bomba que se encarga de llevar el suministro de la planta hasta el pueblo puso a los casi nueve mil habitantes de la localidad en una situación desesperante.
La falta de agua obligó a los colegios de la localidad a reducir el horario de clases, en la escuela Nº 74 Gobernador Benigno Rodríguez Jurado pese a contar con una cisterna propia debieron acortar el horario de clases para todos los alumnos durante este martes y en el caso de Jardín también el miércoles.
Los bomberos hacen lo que pueden con sus camiones y cargan los tanques de agua particulares de algunos vecinos que lo solicitaron.
El intendente Facundo Domínguez le dijo a El Diario que el problema de la bomba “ya está resuelto y que sólo queda un paso que es purgar las cañerías porque les entró mucho aire”. Con respecto a los plazos estimó que “cerca de las 19 todo el pueblo tendrá el servicio normalizado”.
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