Una familia salió ilesa de un accidente doméstico ocasionado por una fuga en una garrafa, lo que provocó una explosión en la zona del techo por la acumulación de gas en ese sector de la vivienda.
El hecho ocurrió cerca de las 23:30 de este lunes en la casa 12, manzana D del barrio San Luis XXXII. Cuando sucedió ocurrió en una pequeña habitación ubicada en el fondo de una casa. Allí dormían Yamila Pereyra, de 21 años, su pareja Manuel Alejandro Oliva, de 20 y el hijo de ambos, con apenas un mes y medio de vida. Aunque todos están todos fuera de peligro, el menor estuvo en observación en el Hospital Cerro de la Cruz y luego fue dado de alta.
Los bomberos del Cuartel Uno intervinieron en la emergencia, que finalmente sólo registró daños materiales.
Según explicó Oliva, todo ocurrió cuando Pereyra intentó prender la cocina. Por la explosión se cayó parte del techo de durlock. Fue en ese momento donde el padre del nene se tira encima para protegerlo y al caer el material golpea su espalda, que afortunadamente, no les causó lesiones de consideración.
Además, Oliva también contó que por la explosión, la cocina se elevó a una altura considerable y cayó al piso como destartalada. Uno de los extremos del somier se prendió fuego y por la onda expansiva, se salieron algunos azulejos del baño.
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