“No hay nada más efectivo que la palabra ‘liquidación’. La ponemos en carteles o pegada a la vidriera y la gente entra”, dijo Cintia Oliva de la tienda de indumentaria masculina Sounio. La fórmula mágica para atraer compradores, al parecer, es conocida por todos los comerciantes, que adelantaron la temporada de rebajas 30 días antes de lo habitual, en relación a años anteriores. El motivo: la caída de las ventas luego del furor de Navidad y Año Nuevo. Con descuentos de hasta el 50 por ciento, los locales compiten entre ellos para atraer a puntanos y turistas.
Como pasa siempre, las zapaterías fueron las primeras en desplegar sus rebajas. Los combos incluyen alpargatas, chatitas y los tan cotizados suecos de verano. Los precios van de los $300 a los $600. “Nosotros empezamos con las liquidaciones a principios de enero. La gente que más entra es de afuera y lleva varios pares a la vez”, comentó Jennye Stefani de Heben.
La forma de pago es crucial a la hora de llamar la atención de los compradores, afirmaron los vendedores a El Diario de la República. Por eso todos ofrecen descuentos especiales para determinadas tarjetas de crédito y también regalos si la adquisición es al contado. Otras estrategias comerciales son los 2x1, en los que al comprar dos prendas, la segunda sale la mitad de su valor. “Todos nuestros diseños y bolsos están a $300. Pusimos ese monto hace 20 días, pero sólo son al contado, porque son productos bordados y rebajados a casi un 80 por ciento de su valor original. Hasta ahora nos ha ido bastante bien. Enero es un mes largo y la gente agotó su billetera en las fiestas, no vendimos como en otros años”, dijo Rosa Opazo de la tienda Atrápame Romeo.
Los descuentos no llegaron a todos los sectores. Accesorios como anteojos, relojes y artículos de perfumería aún no tienen su cartel de rebaja. Tampoco las tiendas exclusivas para niños y las librerías, con todo su despliegue de agendas. Si bien las ofertas están destinadas más que nada a las mujeres, la variedad no alcanza a todos los talles ni a números de calzado. En la mayoría de las zapaterías faltaba el número 37.
La cercanía de las clases es otro de los motivos por los cuales el comercio adelantó las liquidaciones. En Sportotal quieren agotar el stock estival antes del inicio del ciclo lectivo. Así lo afirmó Matias Godoy, su encargado, que mostró remeras y musculosas, casi a la mitad de su valor. “Queremos aprovechar el movimiento turístico para vender todo lo que podamos y así ingresar las cajas de zapatillas y la ropa deportiva para niños, que es como la segunda gran venta después de las fiestas”, expuso. Adquirir la temporada otoño-invierno es otro de los motivos que empuja a rematar. Algunos locales ya muestran en sus perchas adelantos de sacos y pantalones.
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