La posibilidad que la sucursal mendocina de "La Saladita" desembarque en la provincia toma cada vez más fuerza. El dueño de la feria informal más grande del país, Jorge Castillo, le indicó a El Diario de la República que la instalación del mercado en tierras puntanas es un paso probable. Afirmó que ya está en tratativas para la adquisición de un predio de 100 hectáreas, ubicado sobre la vera de la ex ruta 7, donde funcionaría “la ciudad comercial”, como él mismo la definió, aunque no dio detalles de su ubicación exacta.
“No digo que esté cien por ciento confirmado porque siempre puede pasar algo, es un tema político”, explicó Castillo, quien agregó que la llegada de "La Saladita" a San Luis dependerá en gran medida del desenlace que tenga el conflicto que mantiene con el Municipio de Santa Rosa (Mendoza), donde actualmente tiene una sucursal de la feria, a la que amenazó retirar ante las acusaciones que le hizo la Intendencia de haber evadido impuestos por más de 2 millones de pesos.
“Todo va a depender de que me vaya de Mendoza. San Luis está cerca de Santa Rosa (a poco más de 250 kilómetros), me puedo llevar a la gente que trabaja y no dejarla en la calle. Me compraré un micro, los llevaré y los traeré a la mañana y a la tarde, no lo sé. A un empleado lo hablo cien veces antes de echarlo, me gusta la construcción, no la destrucción”, sostuvo “el rey de La Salada”, como ha sido apodado.
Según los medios nacionales, Castillo controla un negocio que mueve cientos de millones de pesos en Lomas de Zamora, en el sur del Conurbano Bonaerense, donde todas las semanas centenares de colectivos, combis y otros vehículos transportan hasta allí a clientes de toda la Argentina y de países limítrofes, para abastecerse de productos que se venden, aseguran, un 70 por ciento más baratos que en los comercios formales. A la feria se la acusa de ser un centro de evasión fiscal, falsificación de marcas y de aprovisionarse de talleres clandestinos.
Los comerciantes puntanos recordaron el rosario de denuncias que cosecha el mercado popular y reconocen que será difícil competir con la feria, por lo que se oponen al desembarco.
"Las diferencias con los comerciantes va a estar siempre pero un pantalón que nosotros en "La Salada" lo vendemos a 150 pesos, en un comercio lo pagás a 500 pesos. Hay 350 motivos para decir que somos los peores y ellos nos compran a nosotros", sostuvo el emprendedor bonaerense, quien indicó que todas las semanas llegan hasta el sur del Gran Buenos Aires para hacer sus compras, gente de Mendoza, San Luis y San Juan en un promedio de 15 a 20 micros por mes.
"Me voy de Santa Rosa"
Pese a que todavía mantiene en reserva la instalación en la provincia, Castillo fue contundente al anunciar su retiro de Santa Rosa. Así lo expresó en su cuenta personal de Facebook: "En respuesta a los numerosos llamados que estoy recibiendo de parte de gente de Mendoza, confirmo por este medio que la respuesta a lo que me preguntan es afirmativa. He tomado una decisión. Me voy de Santa Rosa. El motivo es muy simple, no me dejan trabajar. No me dan garantías de ninguna naturaleza. No me dan ninguna certidumbre para que siga invirtiendo. Tampoco me dan seguridad (en menos de un mes sufrimos dos robos de magnitud y nada se sabe aún de los responsables). Ni mi inversión ni el trabajo de la gente que me acompaña puede estar sujeto a los vaivenes, intereses y presiones de una campaña electoral (somos individuos y familias de trabajo, no una estrategia de campaña)".
La Cámara de Comercio ya está en alerta y promete dar pelea
El presidente de la Cámara de Comercio de San Luis, Vito Carmosino, rechazó la posible llegada de "La Saladita" de Santa Rosa a San Luis. El comerciante ve que la posibilidad que la feria se instale en San Luis es una amenaza concreta y recordó que en el 2013 Jorge Castiilo ya había amagado con emplazarse en tierras puntanas.
“Es de suponer que intentaría de nuevo con la capital provincial”, comentó preocupado. El responsable de la Cámara de Comercio local aseguró que la llegada de la feria "afectaría directamente al mercado que está formalmente instalado, que paga todos los impuestos y tasas para mantener las puertas abiertas”.
Aseguró además que los comercios que trabajan en el mercado “nunca están en regla”, y que "lo único que hacen es comercializar productos de dudosa procedencia. Por eso venden más barato”. Recordó que el mercado tiene denuncias de trabajo precarizado, corrupción y evasión fiscal.
En el caso de que "La Saladita" de Mendoza decida instalarse en la provincia, el presidente de la Cámara de Comercio aseguró que tiene una estrategia, aunque no reveló cuales serán las acciones que tomará.
No son pocos los puntanos viajan hacia Santa Rosa para comprar a menor costo y revender después la mercadería. Incluso hay varias páginas de Facebook que ofrecen excursiones todos los fines de semana.
Señalan que a la feria asisten alrededor de 15 mil personas sábados y domingos, pero en el último tiempo disminuyó la concurrencia.
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