La situación patrimonial y financiera de Estudiantes es crítica. Ahumada hizo todo para dejar a la entidad en la quiebra. Las deudas y contingencias ascienden a $24.686.970. Un despropósito. Por eso, ayer en Terrazas del Portezuelo, Ivana Bianchi (interventora del club), brindó una conferencia de prensa. La diputada nacional estuvo acompañada por los abogados Natalia Sarmiento y Andrés Fernández, el contador Gabriel Perarnau, y el abogado de Fiscalía de Estado, Hugo Scarso.
Al 31 de diciembre de 2015, el déficit llegaba a $17.309.330, pero las malas noticias del "Verde" no terminaron en esa cifra, ya que hay que sumarle muchos números que asustan y preocupan.
Apareció una deuda con la AFIP por $845.478. No se paga desde enero de 2015. A pesar que la comisión encabezada por Ahumada recibió aportes de la televisación -$1.200.000 por mes- y de la gestión de ex gobernador Claudio Poggi -23 millones-, sufrió amnesia a la hora de abonar las cuentas.
Además adeudaba $302.407 en conceptos de ART. Esto deja reflejado que los jugadores no tenían cobertura. Ni siquiera los chicos de las juveniles, que viajaban cada quince días a jugar los torneos de AFA.
La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) reclama $2.541.388 por adelantos financieros. A Futbolistas Argentinos Agremiados no se le abonaron aportes y contribuciones de la Obra Social y cuota sindical, período de junio de 2015 a junio de 2016, por un total de 767.713 pesos.
Ni la Liga Sanluiseña de Fútbol se salvó de Ahumada. Le deben $245.044, donde hay cheques sin fondos por $9.845 y aportes a la Liga de 2103 a 2016.
Los jugadores y el cuerpo técnico también lo sufrieron. Tres meses de haberes les debe (julio a setiembre de 2016), el monto asciende a $2.555.667. Los jugadores que vivían con lo justo y necesario en un hotel en Lobos, recibieron cheques sin fondos. También hay juicios laborales por $119.943.
El empresario hizo todo para llevar a Estudiantes a la quiebra. Él y un grupo de amigos tomaron las riendas del club como una empresa familiar y la manejaron a su antojo.
Manejos muy turbios. Muchas cosas raras. Un club de 96 años, que tiene una gran barriada y muchos hinchas genuinos, hoy está en terapia intensiva. El gobierno provincial salió al rescate. Primero con la normalización y después con la intervención. El "Verde" quiere pasar a una sala común para después tener el alta definitiva.
La pregunta del millón es saber cuántas deudas más aparecerán. Y si esas deudas son reales o ficticias.
Hay que seguir trabajando para sacar a Estudiantes de este mal momento. Los hinchas deben hacerse socios. El próximo presidente debe ser un hombre del club y no entregar la entidad como lo hicieron cuando le dieron las llaves a Ahumada. Los jugadores sacar ese temple para mantener al equipo en el Nacional B. Todos deben hacer causa por el "Verde". Hay que sacarlo de esta crisis para que comience a caminar de nuevo.
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