Chapecó recibió, este sábado, los cuerpos de las personas muertas en el accidente aéreo de Medellín, para rendirles un tributo multitudinario en el estadio del pequeño equipo del sur de Brasil.
Dos Hércules-130 de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) llegaron con los restos de los 50 futbolistas y directivos del club repatriados desde Colombia.
El primer arribo fue saludado por una salva de fuegos artificiales en el Arena Condá, que empezó a llenarse desde las primeras horas de la mañana, pese a la lluvia torrencial.
Una procesión acompañó los ataúdes hasta el estadio, donde el equipo vivió horas memorables de la epopeya que los convirtió en finalistas de la Copa Sudamericana. Un sueño que se estrelló en las montañas de Medellín.
Desde el club estiman que unas 100.000 personas irán a la cancha a despedir a los héroes. Aunque por la capacidad (estimada para 19 mil espectadores), la gran mayoría deberá seguir el velatorio desde el exterior, a través de dos pantallas gigantes. Quienes ingresen no podrán acercarse a los ataúdes en el césped.
La gran mayoría de los 71 fallecidos en el accidente serán velados en el club. Los otros eran tripulantes del avión o periodistas de grandes medios que fletaron vuelos para trasladar los cuerpos.
Tras la ceremonia, las familias podrán viajar con sus fallecidos a sus lugares de origen, ya que la mayoría del plantel no era de Chapecó.
AFP-NA
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