Con el corazón y una peña, ayudan a un chico con cáncer

Mientras esperaba en una sala del Hospital Pediátrico "Humberto Notti" que le dieran los resultados de un estudio de su hijo, a Gustavo Sosa le comentaron: “En San Luis hay un ‘loco’ que organiza festivales para ayudar a los niños como los nuestros”. Preocupado como estaba respondió con monosílabos, y al día siguiente Fernando “Pappo” Balague lo llamó para decirle que su Escuela de Rock haría un encuentro musical para colaborar con Lionel, el pequeño de 8 años de Gustavo, que padece cáncer de mediastino. El “Folk Rock x Lionel” será el 11 de noviembre, en el polideportivo municipal de La Punta. La entrada sale $50. Lo recaudado tiene dos destinos: financiar parte de los gastos que la familia tiene en Mendoza y solventar la edificación de una habitación especial para el niño.
Con la difusión en las redes sociales y a través de Balague, el caso llegó a oídos del Ministerio de Salud, que también colaboró con los Sosa.
“Cuando me enteré de Lionel, con la Escuela de Rock ‘Norberto Pappo Napolitano’ veníamos de realizar dos festivales. Primero organizamos ‘Rock por Lourdes’, una campaña para ayudar a una nena internada también en el Notti, pero con leucemia aguda. Juntamos más de $60 mil. Luego apareció Constanza, otra nena que hacía un tratamiento para combatir la leucemia linfoblástica aguda en Córdoba. Para ella armamos otro evento con bandas locales y llegamos a los $75 mil”, contó Balague. “Un día me llamó el papá de Lourdes y me comentó de Lio. Y ahí nos pusimos a pensar en cómo darle una mano”, agregó. 
Junto a su tropa de estudiantes de música y su grupo de amigos ya lanzaron la publicidad de “Folk Rock x Lionel”, una combinación de bandas y estilo que reunirá a una decena de músicos locales y de Buenos Aires. Todo lo que reúnan con las entradas más las ventas de la cantina será para los papás del niño, Gustavo y Pamela. El matrimonio tuvo que dejar a sus otros hijos Benjamín, Bianca y Thiago, al cuidado de una madrina, para mudarse a un departamento alquilado en Mendoza. Mientras Pamela cuida a Lionel, Gustavo hace los trámites para autorizar los estudios y las compras de los alimentos para ambos. Lo que significa mantener a dos familias a la vez, a ellos en la vecina provincia y a sus otros pequeños que quedaron en San Luis.
“Conocí a Lio. Lo visité en su casa, porque le han dado unos días. Su papá me dio la historia clínica, el Concejo Deliberante me la solicitó para otorgarle una ayuda económica". El fan de Pappo destacó la solidaridad puntana que abarca a sus alumnos, los integrantes de la cartera ministerial y todos los músicos que subirán al escenario ad honorem. También a la ciudad de La Punta que prestó el polideportivo, a los que lo llamaron para donar el sonido, el escenario, las luces y la comida de la barra. 

Todo empezó en mayo 

Hasta los dos últimos días de mayo, Lionel, que cumplirá 9 años este viernes, era un nene súper normal, describió su papá. No se enfermaba nunca y era el primero en levantarse para saludar en las mañanas, antes de que él entrara a trabajar. De la noche a la mañana, recordó Gustavo, comenzó con dolor de garganta, lo llevaron a una clínica y los estudios le salieron bien. Pamela optó por pedir otra opinión y una médica de cabecera los envió al Policlínico. Ahí empezó todo. La inflamación de ganglios era producida por un cáncer de mediastino. El tumor era maligno y estaba tan avanzado que el niño tuvo que empezar a dormir sentado y lo derivaron a Mendoza. El 1º de junio arrancó con quimioterapia y a la fecha ya completó dos bloques de más de 30 sesiones. 
“Fue todo tan rápido que no entendíamos nada. Hasta el día de hoy no entiendo nada. No lo puedo creer. Ahora el tratamiento está parado porque las sesiones de quimio le bajaron las defensas, le salieron piedras en los riñones y ya no camina. Hasta estuvo en terapia y con respirador artificial. De todas formas son cosas que pasan, con todo eso la evolución es positiva”, contó Gustavo. 
Por estos días el ánimo de Lio mejoró, durante un buen tiempo dejó de hablar y de reír, ni siquiera quería hablar con la psicóloga del hospital, pero la vuelta a la provincia y estar con sus hermanos de a poco le mejoró el semblante. “Está enojado, es un niño y le ha pasado de todo y de golpe. Los doctores nos dijeron que el 70 por ciento de los chicos que tienen este cáncer se recuperan, yo tengo fe de que él va a ser uno de ellos. Le digo que hay mucha gente que no lo conoce y lo quieren bien y esas cosas lo sorprenden".

Mano solidaria del gobierno provincial

Apenas tomó conocimiento del caso de Lionel, la ministra de Salud, Graciela Corvalán modificó su agenda y visitó a la familia Sosa el fin de semana. Cuando llegó a la vivienda, Gustavo estaba levantando las paredes de la que será la habitación de Lionel. Un espacio especial, con baño privado, calefacción y todo lo necesario para que descanse en sus altas transitorias y sin el peligro de que pesque un virus. 
“La ministra y su secretaria fueron muy amables conmigo. Conocieron a Lio y a mis demás hijos y me preguntaron sobre el tratamiento. También quiso ver la pieza. Al irse me solicitó que armara un presupuesto con lo más urgente para el avance y al otro día me hicieron llegar un cheque de $25 mil para continuarla”, contó Gustavo emocionado. Agregó que Corvalán también los ayudó monetariamente con dos meses para el alquiler del departamento de Mendoza  y que le pidió que la mantenga informada sobre cualquier cambio en el tratamiento o necesidad.