Fiesta clandestina en Villa Mercedes: investigan por robo al novio de la organizadora

Casi todas las personas que la madrugada del domingo fueron aprehendidas en una fiesta en el barrio Güemes de Villa Mercedes pudieron regresar a sus domicilios a las pocas horas. No obstante, ninguno consiguió zafar de la imputación por violar la medida de aislamiento social impuesta por el Gobierno para evitar la propagación de coronavirus. En los próximos días serán indagados por esa causa en el Juzgado Contravencional y Correccional 2. Pero el único de los 41 demorados que no logró recuperar su libertad fue Ivan Stodulsky, el novio de la mujer que organizó la fiesta. Y es porque hacía casi un mes que la Policía lo buscaba por ser el principal sospechoso de asaltar a un hombre para robarle la moto.

Ayer, el joven de 22 años fue indagado por el juez instructor Penal 2, Leandro Estrada. Fue asistido por el defensor oficial Matías Farinazzo Tempestini y se abstuvo de declarar y solicitó una prórroga de la detención de cinco días, confirmó el magistrado.

Stodulsky está sospechado de ser uno de los delincuentes que la madrugada del 18 de marzo asaltó a Miguel Ávila. Esa noche, alrededor de las 3 de la mañana, el hombre de 47 años había salido en su moto a buscar a uno de sus hijos, que estaba en el barrio 960 Viviendas.

Luego de cargar combustible a su Zanella 110, en Jujuy y Leonismo Argentino, vio a un joven que se le acercó a pie y a toda marcha. Empuñaba lo que parecía ser un revólver. Sin mediar palabra, se subió a la moto de Ávila, detrás de él, como si fuera su acompañante, le apuntó con el arma sobre la espalda y le ordenó que condujera por calle Nelson, hacia el norte.

Tras pasar los barrios Eva Perón I y II, el delincuente le dijo que frenara en la ruta 8, poco antes de llegar al puente. Ahí lo esperaba un cómplice, según denunció Ávila.

El dúo le revisó los bolsillos y le ordenó a Ávila que le diera plata. Como no consiguieron nada, uno lo hirió en la mano con un destornillador y el otro le pegó una patada que lo tumbó sobre el asfalto. Cuando el hombre estaba en el suelo, los asaltantes se subieron a la Zanella y escaparon.

A los dos días, la novia de uno de los hijos de la víctima publicó fotos de la moto robada en un grupo de compra y venta de Facebook. Le preguntaba a los usuarios si alguien tenía un dato sobre dónde o quién podía tener el rodado. Al poco tiempo, una persona le contestó que Stodulsky la ofertaba por las calles.

Los policías allanaron la vivienda de Stodulsky, en Bélgica al 2120, en el barrio Villa Celestina. Pero no encontraron la moto de Ávila ni tampoco al sospechoso. Lo ubicaron el domingo, en la casa de su novia, en el pasaje Justo Daract. Estaba de fiesta, en claro quebrantamiento de la cuarentena.