Preocupación por el aumento de infecciones graves a causa de piercings en la lengua

Que la adolescencia es una etapa de trasgresiones no es novedad, pero muchas veces eso puede llevara a los chicos a tomar riesgos innecesarios por falta de información. Un caso claro es la colocación de piercings en la lengua de manera improvisada o casera que en los últimos meses han derivado en consultas médicas y cirugías de emergencia en pacientes de entre 14 y 17 años.

“En un primer momento tenemos las infecciones. Al hacer una perforación en la lengua se genera un nicho de bacterias que generan una inflamación, que de no ser tratada a tiempo, puede llegar a casos extremos como comprometer las vías respiratorias”, explicó el médico cirujano maxilofacial Leonel Anello.

También precisó que los consejos que como profesional puede dar es “hacérselos en un lugar que esté preparado y con gente capacitada, que cumplan con la bioseguridad e higiene correspondientes”, y que el paciente que opte por ponerse un arito en la lengua cumpla con las medidas de higiene, y en caso de complicaciones, que consulte a un odontólogo o con a un cirujano máxilofacial.

El especialista señaló, además, que la lengua al ser un órgano sumamente irrigado, si se perfora mal, se puede dañar una arteria o vena y generar una hemorragia muy complicada de detener.

“En el último mes y medio operé a tres chicas. A la última paciente, de 14 años, por una infección que no atendió y se hizo crónica, el piercing le quedó incluido dentro de la lengua, por lo tanto tuve que abrírsela a la mitad para poder extraerlo”, detalló.

Otro de los riesgo que recordó el médico, además de la trasmisión de enfermedades graves como la hepatitis C y el VIH, es que si el paciente es alérgico a alguno de los metales que se utilizan en los aros puede sufrir una reacción grave que también puede llevar a la muerte por asfixia, especialmente cuando se realiza en el interior de la provincia porque hasta que llegue a un centro médico pueden pasar varias horas. 

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