Las buenas prácticas llegan a las exposiciones y ferias

Con el foco puesto en el bienestar animal, la Sociedad Rural de San Luis (SRSL) organizó un curso sobre “Buenas prácticas ganaderas en el manejo de animales”, orientado al ganado en todos sus aspectos durante las ferias, las exposiciones y los remates. La capacitación estuvo dirigida al personal involucrado en el manejo de animales vivos, como los trabajadores de las consignatarias de la ciudad de San Luis y de la propia institución.

“El curso sirvió para adecuar al personal propio que presta funciones durante los encuentros a campo y a los trabajadores de las consignatarias San Luis Feria, Bressan & Cía y Ganadera del Sur. La idea principal es ponerlos en regla, según las disposiciones de Senasa, que rigen a nivel nacional, y también conocer los nuevos lineamientos que vendrán en un futuro, ya que con el paso del tiempo el cuidado del animal está adquiriendo mucha más importancia”, dijo el médico veterinario Juan Carlos Boriosi, tesorero de la SRSL.

El contenido del curso incluyó la carga y descarga de animales, el arreo y el uso de inductores de movimiento, entre otros aspectos.

 

La encargada de brindar sus conocimientos, en el salón de la Rural, que está ubicado entre las calles Belgrano y Rawson, fue la médica veterinaria Andrea Dellepiane, que presentó un manual con fotos ilustrativas y sirvió de guía para los asistentes.

“La Comisión de Ganadería fue la que elaboró el manual de buenas prácticas. Durante la charla explicamos de manera específica cada uno de los puntos. Les mostramos imágenes en las que se ve cómo hacer bien las cosas”, contó Dellepiane, y agregó que “más allá de los requerimientos del Senasa y de otros organismos, la idea es hacer un cambio en la forma de trabajo. No solo por el bienestar de los animales, sino también por el bien de los trabajadores mismos, porque con este tipo de indicaciones evitamos accidentes, que las instalaciones se deterioren y nos beneficiamos todos”.

El punto de partida del curso fue la definición de bienestar animal. “Este fue el concepto en el que nos enfocamos primero, es importante saber qué es, observar las características y el comportamiento natural de los animales, específicamente en bovinos”, indicó la médica veterinaria, y añadió que “además hablamos lo que son las buenas prácticas sin dejar de observar todos aquellos aspectos que forman parte de la logística, de lo que sucede dentro de un remate como la carga y descarga, el arreo de los animales y el uso de inductores de movimiento, entre otros temas”.

Otro punto importante fue definir la cantidad de animales que puede haber por corral. “Los espacios deben ser lo suficientemente grandes para evitar el hacinamiento, reducir el estrés y prevenir lesiones en el ganado. Debido a los estímulos que reciben, estarán en constante movimiento entonces se recomienda que la superficie disponible permita que los animales se echen al mismo tiempo. La superficie varía con la categoría, tamaño, presencia o no de cuernos y la época del año”.

Un tercer aspecto sobre el que ahondaron fueron las consecuencias que tiene no hacer las cosas bien. “Vimos fotos sobre daños que se pueden llegar a producir en la calidad de la carne. Por ejemplo, las maniobras de embarque y desembarque presentan un riesgo alto de producir lesiones y sufrimientos al ganado. Además puede haber accidentes de trabajo del personal, en caso de ausencia de instalaciones apropiadas y/o prácticas de manejo deficientes. Es recomendable, y de particular importancia, que haya coincidencia entre el ancho de la rampa con la puerta del camión, como así también entre el piso del embarcadero y el de la jaula del camión transportador”, aseveró Dellepiane.

“Esta iniciativa es muy importante a nivel institucional e involucra a una gran comunidad en general, a los usuarios y a quienes remiten animales a las sedes de los remates o a las exposiciones ganaderas. Aquellos que compran en las subastas de reproductores y que nos piden que estos animales salgan en las mejores condiciones, para que cuando el rodeo llegue al campo de destino no tenga ningún tipo de tara o de lesión producida en general por malas prácticas de manejo”, explicó Boriosi, y agregó que “en la medida en la que vayamos educando e informando a la gente, todo irá mejorando, nos va a permitir lograr un cambio en las condiciones de trabajo y el resultado va a ser positivo para todos”.

“En este sentido, principalmente lo que se va a trabajar es en los inductores de movimiento, erradicando el uso de palos y lonjas de cuero para castigar a los animales. Lo que recomendamos es aplicar un código con banderas que se componen de un mango flexible y generalmente tienen cosida una bolsa de semillas que hacen ruido, entonces los bovinos responden muy bien a este método, a través del sonido”, explicó Dellepiane, que estuvo al frente de un auditorio con veinte asistentes convocados.

Algunas de las recomendaciones que brindaron para el manejo de los animales es que utilicen aquellas herramientas que eviten el contacto directo, sin  emplear elementos rígidos contundentes o hirientes como los bastones con extremos puntiagudos, cintas o tubos metálicos, látigos, cadenas, arreadores, alambres o correas para golpear con fiereza.

“Usarlos no solo causa lesiones directas, sino que además los animales se mostrarán nerviosos y buscarán evadir este tipo de estímulos, podrían causarse lesiones contra las estructuras de los corrales o dañar a los operarios”, indicó y añadió que “lo importante fue que se llevaran la idea de que somos todos parte de una cadena en la que cada uno, desde su lugar, tiene que aportar para que la ganadería en San Luis mejore y haya buen trato. Los productores, tratando que sus animales estén sanos; el personal cuidándolos en la feria; los veterinarios haciendo nuestra parte y la Sociedad Rural dando el mensaje de lo que está bien”, concluyó Dellepiane.