En los tiempos que corren, es una imagen muy gratificante la que muestra la presencia de un político en una escuela. Mucho más si ese político es el gobernador de una provincia. Grafica el espacio que el primer mandatario le da a la educación, y a una de sus células fundamentales: la escuela. El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, visitó esta semana el Colegio Sagrado Corazón de Villa Mercedes. Para poner las cosas en contexto, la visita tuvo lugar en el marco de las acciones que el Ejecutivo provincial puso en marcha a partir del temporal que azotó a esa ciudad el jueves 26 de enero. El establecimiento educativo fue uno de los tantos edificios que padecieron graves daños en su infraestructura a raíz de la copiosa caída de granizo. Además de los techos, quedaron destruidos muchos vidrios de las ventanas. Los trabajos a cargo del gobierno provincial se extenderán a otras cuatro escuelas, el hospital de la ciudad y la Universidad Provincial de Oficios que serán reparados de inmediato. El Colegio Sagrado Corazón cumplirá 122 años de su fundación. Sus autoridades valoraron la acción del Gobernador y agradecieron el gesto que, lejos de sorprenderlos, llevó a que reconocieran la presencia permanente a través de los años. El diálogo fue animado, pese a la crudeza de un momento difícil para la ciudad y sus vecinos. La madre Francisca Javier Cabrini, fundadora del colegio, fue beatificada en el año 1938 por el papa Pío XI y canonizada en 1946 por el papa Pío XII, quien además, unos años más tarde, la proclamó santa patrona de los inmigrantes. Una enorme historia de vida de una luchadora incansable, pionera del trabajo social y educativo. Una labor que la escuela extiende en el tiempo y sostiene con muchos años de reconocido esfuerzo. En momentos tan complejos para la sociedad, es muy necesario rescatar a hombres y mujeres que, desde el espacio de lucha elegido, supieron trabajar incansablemente para el progreso y el bienestar. Es muy atinado que el Gobierno diga presente en instancias tan difíciles para los vecinos, y mucho más que dirija su mirada sobre una escuela. Esto resalta el trascendente valor de la educación. Señala el rumbo y acompaña el esfuerzo de docentes y autoridades por superar todos los obstáculos y brindar a la comunidad un servicio educativo de calidad.
Es muy importante un Estado presente en circunstancias tan adversas. La ayuda no se hizo esperar. La respuesta fue inmediata, la misma noche del desastre climático. El brutal temporal destrozó vidrios, tanques, techos y muchos vehículos, entre otras cosas. El auxilio está llegando a particulares, comerciantes e instituciones. El aspecto más destacado pasa por lo financiero, con la entrega de créditos blandos a sola firma, para todos los sectores damnificados para el arreglo de sus viviendas y la atención de las necesidades más urgentes que deban ser atendidas de inmediato. Pero más allá de acciones materiales concretas, en estos momentos vale mucho la presencia y el acompañamiento frente a la adversidad. Ni indiferencia, ni desconocimiento acerca de la gravedad de la situación. Hubo una buena capacidad de respuesta: un diagnóstico inmediato, apoyo absoluto al intendente y codo a codo con cada vecino para paliar los graves daños sufridos. Sin especulaciones, sin distingos de ningún tipo y con la ayuda y la solidaridad como consignas exclusivas. Sería de mucha bajeza pretender sacar ventaja en medio de tantas dificultades. Ese comportamiento no sería propio de San Luis y de su gente.
Fue paradójico que, con todo preparado para una gran fiesta, se vivieran momentos tan apremiantes y de tanta angustia. Pero el pueblo de Mercedes puso el pecho. El coraje de los hijos de la tierra de Pedernera dijo presente y consiguió salir adelante. Buscó y obtuvo apoyo en un momento difícil. Las reservas morales de una provincia afloran en estas circunstancias. Es en ellas donde se mide el calibre de hombres y mujeres de bien, de “buena madera”. Ya habrá tiempo de disfrutar juntos tiempos mejores y concurridas fiestas populares, hoy la realidad pedía otra cosa. Y pueblo y Gobierno estuvieron a la altura de la exigencia.


Más Noticias