Poggi, el peor de todos

El desmanejo de los destinos de la provincia, materializado en ajustes brutales, un inédito desdoblamiento de salarios y confrontaciones permanentes, no solo afecta a miles de puntanos, sino que también impacta de lleno en la consideración sobre el responsable principal de esta realidad, Claudio Poggi, quien es el gobernador con peor imagen del país. El colapso en la reputación resulta inédito para un mandatario de la provincia.

Ayer, la consultora CB difundió un ranking, replicado en medios de alcance nacional, que refleja la evaluación realizada sobre la gestión de los gobernadores provinciales y que coloca al originario de Alcira Gigena entre los ocho mandatarios peor considerados. El informe también revela que la imagen positiva del gobernador puntano va en caída libre desde su asunción.

El caso de San Luis se explica en buena parte por el profundo descontento causado por las salvajes políticas económicas implementadas por el Ejecutivo, en especial, el pago de los sueldos en “cuotas”, la paralización repentina de la obra pública y la ausencia de políticas sociales en un contexto muy difícil.

Además de este pésimo manejo económico, la mala imagen de Poggi deriva de un espíritu confrontativo constante que se ha convertido en la triste norma de su gestión. La premisa es evidente: toda acción, programa o política que venía siguiendo la administración anterior debe ser erradicado.

Así, dictaminó el fin de las escuelas generativas para transformarlas en autogestionadas; propició despidos en múltiples áreas, entre las que se encuentran la Policía o los Centros de Desarrollo Infantil, y bloqueó la meritoria evolución deportiva de San Luis FC con una intervención innecesaria y caprichosa, solo por nombrar algunos ejemplos.

El ranking de la consultora CB implica un hecho sin antecedentes. Es la primera vez en la historia reciente de la provincia en la que un Gobernador cosecha una imagen tan calamitosa. Incluso Poggi durante su gestión anterior (2011-2015), cuando abrazaba los preceptos del peronismo, tenía una consideración mucho más elevada que lo posicionaba en el lote de los mandatarios con mejor imagen.

El notable declive en la reputación de Poggi tendrá consecuencias fuera de las fronteras puntanas. Implicará, inexorablemente, pérdida de autoridad y de ascendencia en el concierto de las provincias. ¿Cómo se parará ahora el Gobernador de San Luis para proponer acciones o solicitar recursos en el ámbito nacional con semejante nivel de desprestigio?

Uno de los factores que explican el alto rechazo de la población al mandatario cordobés reside en que la Provincia posee los fondos para evitarles a los trabajadores las penurias económicas. El Ejecutivo posee una caja de 200 mil millones de pesos, cifra que permite eludir el pago salarial en "cuotas". La gestión anterior dejó un saldo de 100 mil millones de pesos en diciembre, con una canasta de moneda extranjera en la que había 30 millones de dólares.

A esto hay que sumarle que hasta fines de enero ingresó al erario puntano una suma de casi 50 mil millones de pesos en concepto de coparticipación y 24 mil millones correspondientes a ingresos provinciales.

Hasta el 30 de enero ingresaron a las arcas puntanas $47.720 millones, un 8% del Presupuesto 2024, que es de $594.000 millones. Ese 8% es casi una doceava parte del presupuesto, o sea, un mes, y no se computa la recaudación provincial.

► Los “bochados”y los aprobados

En el lote de “bochados” difundido por la Consultora CB, además de Poggi se encuentran Claudio Vidal (Chubut), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gustavo Sáez (Salta), Axel Kiciloff (Buenos Aires), Raúl Jalil (Catamarca) y Alberto Weretilnek (Río Negro). El peor considerado es el mandatario riojano Ricardo Quintela.

Los gobernadores mejor valorados por su gestión son Hugo Passalacqua (Misiones), Marcelo Orrego (San Juan), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Valdés (Corrientes), Alfredo Cornejo (Mendoza), Sergio Ziliotto (La Pampa), Martín Llaryora (Córdoba) e Ignacio Torres (Chubut).

La Consultora CB se define como una “empresa líder en el estudio del clima social y proyección de escenarios electorales”, que está a la vanguardia internacional en encuestas de opinión. Aseguran que en los últimos años se han posicionado “entre las encuestadoras más eficientes de Argentina y Sudamérica".