Más detalles del operativo harina: la Policía decía que era cocaína, el test lo descartaba

En uno de los allanamientos que los efectivos de Lucha Contra el Narcotráfico hicieron el 21 de marzo en Villa Mercedes, en el que estaban seguros que habían encontrado cocaína, efectuaron el test que tantas otras veces practicaron. Aquel que consiste en echar un par de gotas de un químico sobre el polvo que presumiblemente es la droga blanquecina. Si el líquido vertido reacciona tornándose azul, la sustancia sospechosa es cocaína, si el color es otro, entonces no es el estupefaciente. La Policía de San Luis hizo esa prueba exprés sobre la bolsa de harina que encontró en la casa de su sospechoso y, aunque el químico no se volvió azul al tomar contacto con el polvo, sino violeta, de todas maneras hizo constar en el informe que le elevó a la Justicia Federal que el reactivo había dado positivo para cocaína. Semanas más tarde, un segundo estudio hecho en San Juan lo desmintió y confirmó que era harina.

Eso detalló Pascual Celdrán, el abogado del hombre que pasó un mes preso en la Penitenciaría de San Luis y otros días más detenido en una dependencia policial de Villa Mercedes, por el accionar del personal de Lucha Contra el Narcotráfico.

El defensor explicó que el reactivo se volvió violeta, pero los policías para no admitir su error durante el allanamiento colocaron en su informe que era "celeste violáceo". "Eso debió llamar la atención del Juzgado Federal, pero bueno, tampoco los culpo porque se supone que ellos tienen que confiar en el trabajo de los policías", comentó el letrado.

Desde un primer momento que los oficiales llegaron al domicilio, su dueño les explicó que lo que había en el mueble del televisor, a la vista de todos, en una bolsita abierta, estilo arpillera, no era más que un kilo de harina que le regalaron en el molino donde supo trabajar, a modo de souvenir. "Mi cliente, de hecho, es de Entre Ríos y se vino de allá para trabajar en ese molino y estuvo ahí varios años", detalló Celdrán.

Tras la detención del hombre por tenencia de estupefacientes, su abogado solicitó su excarcelación.  Le presentó al juez Juan Carlos Nacul los recibos que demostraban que trabajó en dicho molino, también las fotos de la bolsa de harina que secuestró la Policía, la cual tenía en un mueble de su comedor, al alcance de sus dos hijos menores de edad. "Si fuera cocaína, como decían, no hubiera estado ahí, en una bolsa abierta y a la vista de todos", dijo el letrado.

El abogado no puede saber si el actuar de los agentes de Lucha Contra el Narcotráfico fue producto de una confusión o se trató de un acto de negligencia. "Para mí que ellos no querían reconocer su error, cuando la prueba les dio otro color, por eso pusieron celeste violáceo", agregó.

En realidad, la investigación estuvo mal hecha desde un principio, apuntó. "Estuvieron como tres meses diciendo que el domicilio de mi cliente era al 1060 cuando era 1066 y que ahí vivía un tal 'Pelado', cuando a mi defendido no le dicen así", comentó.

Para la esposa del dueño de la harina, los efectivos confundieron a su marido con un anterior vecino que residió en esa misma casa, estuvo vinculado a la venta de drogas y era conocido con el apodo de "El Pelado". "Mi representado se fue a vivir ahí, que es una zona bastante alejada, por las dificultades económicas... Pero él nada que ver con las drogas, si ni consume", aseguró.

Celdrán adelantó que al Juzgado Federal todavía le falta resolver su pedido para revocar el procesamiento de su cliente. Cuenta con que se lo otorgarán, puesto que finalmente quedó demostrado que lo que incautaron de su vivienda fue harina y no cocaína. El juez puede demorar unos 15 días en dar una resolución al respecto.

A un margen de eso, el defensor dijo que pedirá la declaración de un testigo que, según la Policía, les había dicho que el dueño de la harina le vendió droga. "Se trata de una persona que agarraron a dos cuadras de la casa de mi representado, dijeron que tenía un gramo de marihuana que mi cliente le había vendido. Lo cual es falso, porque nunca le tomaron declaración, ni lo llamaron", abundó.

Por el tiempo que el vecino del barrio El Criollo estuvo preso está en condiciones de iniciar acciones legales contra el Gobierno de la Provincia. "No sé si mi cliente va a tener ganas de hacerle juicio, pero la verdad es que está muy molesto porque la pasó mal él y su familia", manifestó. El abogado resaltó que su defendido fue el único que permaneció un mes en la penitenciaría, dado que las otras personas, a las que sí sorprendieron con dosis de cocaína y marihuana, les otorgaron la excarcelación de inmediato o los procesaron en libertad.

"La próxima vez, el Juzgado Federal se va a tener que fijar bien cuando le autorice los allanamientos a la Policía de la Provincia, porque es una locura lo que han hecho", expresó. En el caso de un juicio contra el Gobierno de San Luis, el Estado provincial deberá pagarle al hombre que estuvo preso por ser el propietario de un inofensivo kilo de harina.