Desde hace cinco días los vecinos del barrio Cerro de la Cruz acumulan bronca. La falta de agua por la baja presión afecta principalmente a las manzanas 224, 239 y 240. Las altas temperaturas de la semana pasada, los golpes de calor, y el dinero gastado en comprar bebidas, dieron como resultado una ola de enojo y disconformidad colectiva. Aseguran que aún no se ha solucionado ningún problema, al contrario, empeoran con el paso de los días.
El disgusto desencadenó en que el sábado pasado los vecinos tomaran la iniciativa y cortaran la Vía del Peregrino, donde quemaron gomas a modo de reclamo. “Yo tengo la suerte de no vivir acá, cuando necesito agua o ir al baño, me subo al auto y me voy a mi casa” contó Gustavo, quien alquila el local de su negocio frente a donde fue la protesta. “A veces el agua sale a chorritos y así no se puede”, agregó.
Pero la mayoría no tiene esa dicha, María Elena Valdiviesa que vive en el barrio hace 16 años, afirmó que el asunto desde su llegada al Cerro de la Cruz es peor. Relató que su nieto no va a la escuela hace una semana por la falta de ropa limpia, que para higienizarse y lavar la ropa que se junta en la semana, deben ir a la casa de una amiga en la ciudad que les hace las veces de lavandería y baño público. Además, mostró debajo de la mesada de su cocina, donde se alinean una docena de botellas que contienen agua para lo más indispensable.
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