Muestra Colectiva de Fotografías en Villa Mercedes

El fin de un ciclo, el balance de un espacio cultural, y los recuerdos llevaron a que la fotógrafa Marina Lara reúna en un lugar esos ítem. Para la reportera, organizar una muestra en el Molino Fénix fue altamente movilizante, pues su abuelo trabajaba allí.

Muestra de los alumnos de “Mi Espacio de Música e Imagen” hasta el 27 de diciembre en el Molino Fénix, Pueyrredón 1629. Entrada: libre

La segunda muestra colectiva de fotografías de los alumnos del taller “Mi espacio de música e imagen” empezó en los salones del Molino Fénix y más allá de mostrar los resultados del curso realizado por sus alumnos, la tarea más difícil fue coordinar la exhibición, una labor que cayó en Marina.

“Hay que poner mucha voluntad de cada una de las partes involucradas”, dijo la joven. Y señaló que su parte fue trabajarla; la de los expositores, organizarse; y de los encargados del lugar, predisponerse a encontrarlo. "No hay muchos espacios como éstos en la ciudad", dijo la reportera villamercedina.

Comunicadora social que da clases de Fotografía y Cine en la escuela “Leonardo Da Vinci”, Marina también dio talleres de Periodismo en Icced, y participó en algunas filmaciones locales. El último fue “Ónix”, de Nicolás Teté, filmado en Mercedes.

Con más de 40 expositores, la muestra tiene algo muy importante, según resaltó la curadora. Y es que debido a la aceptación que tuvo con la primera muestra, varios de los que fueron asistentes cayeron bajo el embrujo de la fotografía, realizaron cursos y ahora les llegó el turno de exponer.

“Éste año fue una bisagra para ellos: pasaron de observadores a protagonistas”, dijo Marina, quien aclaró que sus chicos fueron incentivados por aquellas fotografías del año pasado.

La artista, que creó el taller en 2009, destacó a colaboradores como Juan Andrés Galli, “una parte fundamental de Mi Espacio”; y al fotógrafo Miguel Ángel Esmoris. Ambos profesionales dictaron workshops en la escuela.

En la inauguración oficial de la muestra hubo música en vivo con un grupo de jazz y djs, más luces y proyecciones.

“La verdad es que la convocatoria fue increíble. Había mucha gente”, comentó la fotógrafa, que todas las tardes va a la galería para conversar con los asistentes y cuidar las obras, ya que por el calor algunas se despegan.

“Quiero estar en todos los detalles”, resaltó sobre los cuidados que le implican esta movida independiente, sin subsidios, que continuará hasta el sábado. “Y si pueden ser más días, mejor”, bromeó.