A diferencia de lo que piensa el defensor oficial, Hernán Herrera, para el juez Contravencional y Correccional, Santiago Ortiz, la versión de una menor de 16 años que aseguró haber visto cuando un grupo de hombres molía a golpes a Abel Ortiz y lo tiraba inconsciente y empapado en sangre en un campo de Sampacho no es suficiente para que la causa del hombre, que lleva 79 días sin dar señales de vida, migre de su juzgado a uno Penal.
Para el juez Contravencional y Correccional, Santiago Ortiz, la versión de una menor de 16 años no es suficiente para que la causa del hombre migre de su juzgado a uno Penal.
"Si bien tengo en cuenta el planteo del defensor, considero que no existen elementos en la causa que validen el apartamiento propuesto por él", resumió el magistrado.
Ese planteo de incompetencia Herrera lo hizo hace poco más de dos semanas. Fue después y, básicamente, como consecuencia de la declaración que dio la "testigo clave" en tribunales.
A raíz de esa testimonial, el defensor comprendió que, como mínimo, el caso de la desaparición del hombre de 30 años debe entenderse como uno de "lesiones graves". "(...) teniendo en cuenta de que si Ortiz hubiera sufrido una lesión como esa, la pena de ese delito va de uno a seis años. Y, como hay que tener en cuenta el máximo de la condena, la cantidad de años excede el tope de los delitos que atiende el juzgado Contravencional y que van hasta los cuatro años", explicó el juez.
Uno de los puntos que encaminó al magistrado a no hacer lugar a la incompetencia es el hecho de que "las lesiones graves" no pudieron ser validadas. "No existe, por ejemplo, un certificado que dé constancia de eso", dijo.
"Esto no quiere decir que le resto importancia a la declaración de la menor, pero creo que por ahí es muy prematuro desprenderme de la causa sólo por su testimonial. Por eso creo que debo seguir con la investigación, por lo menos, hasta que surjan elementos que de por sí impliquen que la competencia del juzgado daba ser criminal y no contravencional", expresó.
Ortiz comentó, por otro lado, que la semana pasada llegaron los resultados de los análisis de sangre que revelarían si los rastros hemáticos hallados en el domicilio de la ex del desaparecido, Alejandra Espinosa, son de Abel. "Aunque ya están acá no puedo revelar nada hasta tanto no sean adjuntados al expediente", afirmó el juez. De todas formas, adelantó que la semana que viene, a partir de esos estudios y los registros telefónicos que recibió hace 15 días de La Pampa, llamará a declarar a algunas personas.


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