Dirigentes de todos los sectores de la oposición elogiaron ayer la decisión del juez federal Ariel Lijo de procesar al vicepresidente Amado Boudou en el caso Ciccone y pidieron su alejamiento del cargo, aunque en caso contrario se mostraron dispuestos a impulsar un juicio político en su contra.
Así se manifestaron, entre otros, el ex vicepresidente Julio Cobos; el titular de la UCR, Ernesto Sanz; la líder del GEN, Margarita Stolbizer; el ex presidente Eduardo Duhalde; el líder del Frente Renovador, Sergio Massa; la vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal; el titular de la CGT Azopardo, Hugo Moyano; el referente de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo; la legisladora porteña Graciela Ocaña, entre otros.
El vicepresidente continúa en Cuba y no trascendió información oficial sobre su retorno.
Massa instruyó al presidente del bloque en Diputados, Darío Giustozzi; a la vicepresidenta de la Cámara, Graciela Camaño; y al coordinador de los equipos de Transparencia Institucional, Adrián Pérez, "para que articulen con el resto de los sectores de la oposición la posibilidad de llevar adelante el juicio político".
"No sólo tiene que ser el trabajo del Poder Judicial, sino también el del Parlamento el que determine los grados de responsabilidad. Es, en definitiva, la tarea que tiene que enfrentar el Congreso, y mucho más quienes tenemos el rol de control dentro del Legislativo", señaló el precandidato presidencial.
Al respecto, Camaño fue enfática al señalar que en este caso "lo que está cuestionado es el Poder Ejecutivo porque es un binomio" y agregó: "Tenemos que dilucidarlo por la vía del juicio político y la Presidente tiene que definir si va a mandar a sus legisladores a votar a favor de que el binomio siga cuestionado con un hecho de corrupción que ya tiene la semiplena prueba y que amerita el procesamiento".
Ubicado ahora en la vereda opuesta a su propia situación como vicepresidente, Cobos consideró que el procesamiento de Boudou amerita su "distanciamiento del Gobierno" y sostuvo que "los fundamentos de la resolución del juez Ariel Lijo son causa suficiente para el inicio del juicio político".
"Tiene que dimensionar la gravedad institucional de este hecho. Si no se va, la decisión del radicalismo y la mía en particular, es acompañar a los legisladores que quieran iniciar juicio político", advirtió el diputado mendocino, tras señalar que "la continuidad en su cargo afecta al Congreso y al Poder Ejecutivo".
Sanz, en tanto, insistió con que el vice debe "pedir licencia" y señaló que "el Gobierno tiene que sacarse de encima esta situación", ya que "tener procesado al número dos del país no es una buena noticia" y la presidente Cristina Kirchner "políticamente, es responsable de esta situación".
La diputada Stolbizer consideró que Cristina Kirchner "primero lo debe hacer venir" desde Cuba y luego "le debe pedir su renuncia" pero que "si eso no ocurre, el pedido de juicio político ya no debe ser únicamente por parte de la oposición" porque "este hombre le hace muy mal al Gobierno y al país".
Si bien Duhalde evaluó que "no es momento" de impulsar el juicio político al vice porque "se está incendiando la casa" en medio del conflicto con los fondos buitres, sí sostuvo que la mandataria debería pedirle "que dé un paso al costado".
Moyano opinó que "ha empezado a funcionar la Justicia" y apuntó: "Es lamentable lo que está pasando y creo que el Gobierno debería apartar al vicepresidente de su función".
"Hoy es un día de alegría, porque es bueno que la Justicia diga presente", celebró por su parte Barrionuevo y dijo que Boudou "debería mandarse a mudar".
Ocaña, a su turno, enfatizó que "la situación de Boudou es sumamente complicada en lo político y la coloca a la Presidente en una posición incómoda y "de toda esta maniobra".
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