Nacida en Junín, Claudia Pannone tuvo que seguir el recorrido de todo artista del interior que quiere triunfar: de su pueblo a Buenos Aires. Iniciada en la comedia musical, la cantante pasó por el pop y ahora se dedica al tango, un género que visitará con un repertorio de canciones clásicas hoy y mañana en "Fetiche", el café concert de "Los Cedros".
Dos artistas fueron los que terminaron de trazar el presente tanguero de Claudia. Una fue Eladia Blázquez; el otro Astor Piazzolla. "Por supuesto que voy a cantar algo de ellos en mi primera vez en San Luis", adelantó la cantante sobre el doblete en Estancia Grande.
Gracias al género que ahora explora, Pannnone recorrió el mundo y redirigió su carrera a tiempo para grabar cuatro discos. Pero no olvida sus inicios. Por eso, apenas regrese de San Luis a Buenos Aires, Claudia pondrá las voces de su nuevo disco, una innovadora mezcla de ritmos pop, con letras de corte tanguero. "Las canciones no serán una adaptación de la melodía o versiones en otros ritmos como se acostumbra. Mi apuesta es mezclar los dos géneros", explicó.
La clara intención de la artista es hacer convivir los dos ritmos, una conjunción que años atrás parecía imposible pero que últimamente fue aflojando en las rencillas. Para Pannone, el principal problema era que los compositores de tango querían que sus creaciones respetaran sus inicios.
Si bien Claudia se inclina por el costado tradicional del tango (esta noche habrá homenajes a Tita Merello e interpretaciones de "Naranjo en flor" e "Invierno porteño), una de las bases de su carrera fue el tango electrónico, debido a que fue cantante de "Gotan Project", acaso el grupo que masificó la fusión. La artista entiende la resistencia que tuvo la mezcla en los inicios.
"Yo también me resistía. Dudé mucho en aceptar la propuesta que me hicieron. No consideraba al tango electrónico un género, lo consideraba otra música", recordó Claudia, quien con el correr del tiempo reconoció que el ritmo "abrió la cabeza de miles de argentinos".
Pannone cree que la consecuencia de esa movida es la cantidad de jóvenes comprometidos en la confección de nuevas músicas al ritmo del 2x4. "El tango tiene que seguir vivo, tiene que mantenerse en el tiempo, por eso es bueno que los chicos agarren las riendas y hagan cosas nuevas. Además, mostrar sus creaciones es una necesidad de cualquier artista".
En sus discos, la tanguera consiguió colaboraciones de reconocidos músicos como Pablo Mainetti y Pablo Agri. "Estuvieron porque son muy amigos, pero es difícil llevarlos a tocar en vivo porque tienen mucho trabajo", se lamentó Pannone que, no obstante, llegará a "Los Cedros" con un pianista, un bajista y un bandoneonista.
A los oídos de la artista llegaron los retumbes del Festival de Tango de Justo Daract, un escenario que a Pannone le gustaría pisar. Por lo pronto, su primera vez en la provincia la encuentra con la idea de hacer disfrutar al público de su voz y de un ritmo que atrae por sí solo.


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