Federico Andahazi: "Me encantaría tener más vidas para escribir"

D espués de una espera desesperante (su primer vuelo salió de Aeroparque el jueves pero debió regresar por el mal tiempo sobre San Luis), Federico Andahazi arribó ayer por la tarde, para sumarse al atrayente plantel de escritores programados para la jornada de cierre. Estaba previsto que el viernes tuviera una charla con escritores y estudiantes, pero el destino quiso que llegara, afortunadamente, el sábado para su conferencia sobre "Historia, ficción y descubrimiento". 

"La literatura te permite vivir la vida de tus personajes, viajar en el tiempo, crear otros escenarios"

"Los títulos son una excusa, hay que ponerle un nombre a la charla, pero a mí no me gustan los monólogos, lo maravilloso de estos encuentros con los lectores es que uno puede improvisar e ir viendo qué quieren escuchar. Ese mundo de imaginación donde el lector es una suerte de entelequia se convierte en alguien de carne y hueso. La conversación deriva para cualquier parte y me gusta mucho que me pregunten", sostuvo. 
La visita a la localidad, la primera vez para el escritor, también fue una oportunidad para presentar su última novela "El libro de los placeres prohibidos". Las líneas de la obra contienen condimentos policiales, de suspenso, las artes amatorias y de la falsificación de libros, plasmada en el personaje de Johannes Gutenberg; todo sucede en escenarios europeos. "Me demandó muchísima investigación, tuve que viajar a Alemania, estuve en la cuna de la invención de la imprenta en Mainz. Le tengo mucho cariño al libro", relató.
Para quien quiera dejarse seducir por "El libro de...",  combina los artilugios del copista "con una novela policial, aparece un asesinato y el lector querrá saber dos cosas: quién es el asesino y quién ese personaje tan extraño que es Gutenberg", describió. 
Las novelas de Andahazi están atravesadas por el sexo y la religión. "Es aquello que nos atraviesa a todos. El sexo nos es consustancial y natural. La iglesia encarnó durante muchísimo tiempo al poder y, aunque parezca, no ha cambiado tanto con el tiempo, el dogma sigue siendo el mismo. Creo que son los dos grandes misterios que me obsesionan a mí", sostuvo.
Es psicoanalista y eso puede ser una de las razones por las cuales se expresa con una manera que termina por seducir, tanto como lo hace en sus relatos, o como lo habrá hecho alguna vez con sus pacientes en el diván. Apasionado por la historia y la investigación profunda que pone en evidencia en cada nuevo proyecto, Andahazi reveló que tiene previsto un producto que aún está en proceso de elaboración, pero que estaría centrado en algunas cuestiones autobiográficas.  
"Ayer le puse punto final a lo que será mi próxima novela, que no sé cuando saldrá porque luego viene la etapa de la corrección, la más difícil, pero en ese libro por primera vez toco muchos aspectos de mi propia historia familiar. Es mucho más difícil también, porque una cosa es investigar sobre Gutenberg o Mateo Colón (el personaje de "El anatomista") y otra es hacerlo sobre tus ancestros, los lugares de ellos, esto para mí significó volver a Hungría, para establecer los periplos que trajeron a mi familia de Europa a América", indicó. Por "cábala" no especificó más detalles.
A sus 51 años, y a veinte de su contacto con las letras, consideró que espera seguir con su pasión. "Para futbolista estoy reviejo, para escritor todavía sigo siendo joven, pero lo que falta es tiempo, me encantaría tener un par de vidas más para escribir. Por eso escribo: la literatura te permite vivir la vida de tus personajes, viajar en el tiempo, crear otros escenarios y eso multiplica la existencia".