Hernán Piquín abrió la temporada teatral

Un escenario totalmente despojado y un juego de luces como única fuente de color recibieron a Hernán Piquín en "Pasional". Fue suficiente.

Con el mismo texto: "Muchas gracias San Luis por tanto cariño y amor", Hernán Piquín subió a su Facebook, apenas terminada la segunda función, las fotos del show.

El bailarín y su elenco no precisaron más artilugios, ni siquiera la palabra, para transmitir el sentimiento del tango. Con la función, Hernán cumplió un deseo que anunció antes de comenzar, cuando saludó al público: "Espero que puedan sentir lo mismo que nosotros en el escenario", dijo.

El espectáculo transcurrió entre los opacos blanco, negro, rojo y azul, sumados a los brillos de las lentejuelas.

 Las tres parejas que acompañaron al bailarín fueron las encargadas de iniciar el show con piruetas y pasión. Es probable que Florencia Vélez, Darío Farías, Paola Sabrina Jean Jean, Nicolás Cobos, Sol Viviano y Osmar Odone se hayan robado el show porque, a decir verdad, fueron los que llevaron adelante el espectáculo ante las esporádicas apariciones del primer bailarín.

El amor no requerido se hizo danza con la primera interpretación de Piquín y su primera dama, Daiana Chorni. La pareja hizo una versión libre de "Naranjo en flor" que puso la piel de gallina.
En la segunda mitad del espectáculo, Hernán apareció menos, pero cada vez que pisó el escenario le recordó al público con sus bailes a quién habían ido a ver.
La dupla central emocionó hasta las lágrimas con su interpretación de "El día que me quieras". Y cerca del final, el subcampeón del "Bailando" se transformó en actor para ponerle fantasía a su coreografía de "Balada para un loco", un tema que interpretó en solitario y que extrajo de su show anterior.
Antes, sus compañeros se habían llevado los más furiosos aplausos, sobre todo en "Libertango", un número que por poco hizo explotar la sala.
Al comienzo, Piquín agradeció la presencia de la gente y sus votos pasados para que ganara el programa de Tinelli. De todos modos, el bailarín no logró la hazaña de conseguir el certamen por tercera vez consecutiva.
En una actitud que repite una y otra vez en los escenarios donde se presenta, el bailarín pidió por favor que no sacaran fotos ni encendieran los celulares durante la función. Una seguridad muy ajustada se aseguró que eso no pasara y apuntó con un láser a las cámaras, incluso las que portaban los trabajadores de prensa.
La foto que sí le valió fue la del final, tomada por un productor. La imagen que incluyó a todo el público ahora se puede encontrar en el Facebook del artista, junto a todas las de la gira.