Club La Ribera de Villa Mercedes: autoridades desmienten irregularidades

Las autoridades del Club Deportivo La Ribera decidieron dar su versión y defender la administración que llevan adelante. Días atrás la Dirección de Personas Jurídicas anunció que detectó irregularidades y designó un normalizador para que se elabore un padrón de socios veraz.
Una bandera colgada en el alambrado de la cabecera norte del predio, una pequeña mesa con un prolijo mantel y cuatro libros de actas, carpetas, notas y fotocopias de cartas enviadas. Así esperó a El Diario el presidente del club, y fundador en 2009, Javier Suárez; su esposa y tesorera en la institución, Carina Yubero; Adrián Lucero, delegado de fútbol infantil ante la Liga Mercedes; entre otros colaboradores.
“Queremos dar fe y demostrar que nuestros papeles están todos en orden, buscar un punto final y que las cosas se hagan legalmente como corresponden. Si nosotros tuviésemos irregularidades no deberíamos recibir aportes del Gobierno (suman 185 mil pesos en total) y hasta el día de la fecha eso no se ha cortado, si tuviésemos irregularidades ya lo hubiera notado hace tiempo Personería Jurídica”, explicó el presidente.
Esta semana se supo que la Dirección de Constitución y Fiscalización de Personas Jurídicas y Cooperativas de la provincia había recepcionado en enero un documento con 195 firmas de personas que decían que eran excluidas en el club. La responsable de esa área gubernamental dijo que las autoridades no habían asistido a las asambleas propuestas y resolvió designar a Edgar Leguizamón como Normalizador para que establezca el número real de asociados y se realice una Asamblea.
“A nosotros nos han pasado por alto en cierta forma, no nos han notificado en tiempo y forma, yo creo que para hacer algo así ambas partes se tienen que juntar, nosotros no tuvimos esa oportunidad. En varias ocasiones intentamos que nos atienda la responsable de la Dirección de Personas Jurídicas, para que vea en serio nuestros libros, pero no fue posible”, expresó Javier Suárez.
Los representantes del club también se mostraron molestos porque a quien se designó como normalizador no es una persona imparcial o neutral, si no que es uno de los padres que entró en conflicto con el club desde el año pasado, cuando la institución decidió separar a dos profesores de fútbol infantil.
“Nunca corrimos a los chicos, acá lo que se hizo fue desvincular a dos personas que estaban en la comisión: Franco Suárez, secretario y sobrino del presidente; y Melina Marino que era vocal titular; y algunos profesores. Ellos se llevaron a los chicos y les trabajaron la cabeza a los padres, está mal porque esos niños pertenecen a esta institución y pueden volver al club cuando quieran”, dijo el delegado de Futbol Infantil.
Uno de los puntos que más llama la atención, es que en sus libros el club registra 253 asociados y para tomar las decisiones en las asambleas sólo se toman en cuenta los votos de 14 personas. “Eso fue la última vez, otras veces son menos personas. Pero Personas Jurídicas lo sabía, siempre fue así, ellos nos guiaron y nos dijeron que con eso bastaba. Además, todo el que quiera venir a ver nuestros libros administrativos pueden hacerlo, están disponibles para cualquiera”, indicó la Tesorera y esposa del presidente.