Investigan un intento de asalto en el barrio Jardín San Luis

Los asaltos a mano armada en viviendas de la capital puntana son cada vez más frecuentes. El lunes a la noche hubo un nuevo caso en el barrio Jardín San Luis, aunque por suerte los ladrones no alcanzaron a concretar el robo. Minutos después de que la víctima llamara al 911, la Policía demoró a dos sospechosos en el extremo norte de la ciudad, aunque los liberaron cuando estuvieron seguros de que no tenían nada que ver con el hecho. Hasta ayer, la mujer a la que quisieron robarle no había realizado la denuncia.

Antenoche, cerca de las 20:20, una mujer de 41 años que vive en la calle Juan Saá escuchó que alguien golpeaba las manos frente a su casa. “Abrió la puerta de la vivienda y fue camino hacia las rejas que cierran la propiedad, pero regresó corriendo porque algo le pareció sospechoso”, contó el subjefe de la Comisaría 2ª, subcomisario Juan Barroso.

Según les contó a los policías que la entrevistaron, “había un hombre parado, el que golpeaba las manos, pero vio a otro agazapado en las sombras, como escondido. Por eso se asustó”, describió.

María Laura Ramírez tenía razón en tener miedo, porque cuando llegó al ingreso de su casa los desconocidos habían saltado la reja y pusieron un pie en la puerta para que no la pudiera cerrar. “Dijo que le mostraron un arma de fuego, un revólver, y que la amenazaron, pero de tanto forcejear logró cerrar y los ladrones huyeron”, relató el subcomisario.

Ramírez buscó su celular y llamó de inmediato al 911. “Un móvil del Comando Radioeléctrico fue hasta su casa e hizo circular la noticia por la radio policial”, dijo Barroso. “Montamos un operativo cerrojo para dar con los asaltantes. Participaron patrulleros de nuestra comisaría, de la 7ª y del Comando Radioeléctrico de ambas jurisdicciones”, informó el jefe de la Comisaría 2ª, comisario Pablo Rubatto.

Momentos después, la Policía demoró a dos chicos de 18 y 19 años en calle Riobamba extremo norte. “Los interceptamos en cercanías al predio del COAR. Iban en una bicicleta del Plan Tubi”, detalló el jefe de la Comisaría 7ª, comisario Juan Carlos Leyes. “Al principio parecía que coincidían con las características aportadas por la mujer, pero después constatamos que ni la ropa que tenían puesta concordaba con la de los delincuentes”, aclaró Leyes. Los sospechosos fueron demorados por averiguación de antecedentes y liberados ayer a la tarde. “No tenían causas pendientes. Estaban limpios”, aseguró el comisario.

Hasta ayer, Ramírez, que es empleada pública, no había hecho la denuncia por lo ocurrido. No obstante, el personal de la seccional 2ª investiga el hecho de oficio. “Por el testimonio sabemos que los ladrones eran jóvenes. Uno tenía una campera deportiva color turquesa y el otro, una campera negra y una gorra negra”, detalló Barroso.