Investigan si un docente abusó de una nena de cuatro años

Hacía casi una semana que la mujer de 35 años empezó a notar que su nena de cuatro años no era la misma. El cambio comenzó a brotar un mediodía, después de que la criatura regresó de clases, de la Escuela Nº 7 “Constancio Carlos Vigil”. No es que algo en su forma de ser haya mutado, sino que la niña se sentía incómoda, como si algo en su entrepierna la importunara. Con los días, lejos de desaparecer, el malestar en esa zona se agudizó. Se hizo imposible de no advertir. Y no escapó a los ojos de madre. En una situación que el jefe de la Comisaría 2°, Pablo Rubatto, prefirió no precisar por resguardo de la víctima, la chiquita le contó a su mamá que le dolía esa parte del cuerpo porque su profesor de educación física la había manoseado.

Cuando acusó al hombre de unos 40 años, no lo mencionó por su nombre, sino por su rol como docente de gimnasia. El comisario inspector aclaró que, pese a ese dato, "esa persona, por el momento, no está identificada en el expediente. Está en libertad”. 

La tarde del martes, apenas le confió eso a su madre, la mujer se encaminó a la Comisaría 2ª y asentó la denuncia. Ayer, a primera hora, fue a tribunales y la ratificó. Casi en paralelo, el personal de la seccional actuante giró las actuaciones al Juzgado de Instrucción Penal Nº 3, a cargo de Virginia Palacios.

En su ratificación, la denunciante contó, además, que ella fue a hablar con las autoridades de la "Escuela Nº 7, comentó una fuente judicial. Pero los directivos le respondieron que la palabra de la nena era muy poco y que con eso, con tan poco, ellos no podían hacer nada.

Del mismo informante, trascendió que el juez subrogante, Sebastián Cadelago Filippi, como primera medida ordenó que un médico de tribunales revise a la criatura. Pero hasta ayer el resultado de esa pericia no se dio a conocer.

El informe que sí trascendió, al menos a grandes rasgos, fue el que hizo un médico de la Maternidad Provincial “Doctora Teresita Baigorria”, el primero en examinar a la víctima. El especialista le comunicó a la Comisaría 2ª, cuando le requirieron el dato, que sí: la menor presentaba signos de abuso.

Algo andaba mal

La niña asiste a la escuela del barrio Jardín San Luis desde este año lectivo. Tiene tres hermanos, de los cuales el mayor tiene 15; aunque la Policía no supo precisar si esos otros chicos también son alumnos de la “Constancio Carlos Vigil”.

La pequeña concurre a la mañana y, por lo tanto, en ese momento del día se habría dado el abuso. Por respeto a ella y cautela por la investigación, Rubatto no quiso detallar en qué lapso, según la menor, el docente se aprovechó de ella y en qué lugar, si fue dentro o fuera del establecimiento educativo.

La criatura le dijo a su mamá que el abuso ocurrió una vez, pero que ella sabe de otras nenas que pasaron o pasan por lo mismo con el “profe de gimnasia”.

El Diario trató de comunicarse con la escuela, ubicada en Carpintería al 90, pero nadie contestó a la línea telefónica común ni a la que le asignaron por la Autopista de la Información.