Ayer quedó oficialmente inaugurada la obra de remodelación de la avenida Illia con un acto celebrado por las autoridades municipales en el que se ofreció el tradicional locro a los vecinos de la ciudad. El tramo habilitado parte desde San Martín hasta la calle Caseros y fue denominado “Boulevard de los Jacarandaes”. Cuenta con una ciclovía, un paseo semipeatonal, la instalación de una réplica del reloj histórico eléctrico y la placa conmemorativa que rinde homenaje a quien devolviera el busto de Evita a la comunidad hace 42 años. La obra tuvo un presupuesto superior a los 19 millones de pesos.
“Este boulevard pretende que se descentralice el tránsito y los puntanos vuelvan a caminar. Invita a dejar atrás la mala costumbre de venir a estacionar al centro. El proyecto de semipeatonalización pretende recuperar el espacio público y lograr que la ciudad sea más confortable para todos”, dijo el intendente Enrique Ponce.
En la Intendencia recordaron que la obra de revalorización en este acceso al microcentro continuará hasta la avenida Lafinur.
El reloj tiene su historia. Hace 83 años el joyero José Fenoy se presentó a un llamado de licitación para armar un reloj público en la ciudad. Para el cual hicieron un sistema de cableado subterráneo para su funcionamiento, la primera red de estas características en San Luis.
“Toda la familia lo recuerda como un hecho importante, mi abuelo fue elegido por el intendente Foncueva para poner en marcha ese proyecto y hoy la ciudad le rinde homenaje, estoy muy emocionado”, dijo Orlando Fenoy.
En otro sector del boulevard se colocó una placa de reconocimiento a Antonio Florentino Chía por haber devuelto el busto de Eva Perón. El monumento había sido removido por los militares y fue llevado a la chacarita de Chía, quién lo compró y lo escondió en un campo cercano
Pero la remodelación de la Illia también estuvo envuelta en la polémica. Al principio de la obra los automovilistas se quejaron por el gran congestionamiento del tránsito que produjo los cortes y los comerciantes se quejaron por la acumulación de escombros.
También hubo un conflicto con la Universidad de la Punta (ULP) por el traslado de la línea troncal de fibra óptica. Además, la Comuna ha mostrado reticencia a responder los pedidos de informe solicitados por el Concejo Deliberante en los que se buscaba conocer los detalles legales y presupuestarios del proyecto.
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