Es un gran entusiasma del dibujo, Joel Doncert, uno de los tantos dibujantes que participaron del concurso de "Historieta y tira diaria" que organizó El Diario de la República para celebrar sus 50 años. El joven mostró todo su material con más orgullo que miedo.
El certamen lo tuvo como contribuyente anónimo y utilizó varios dibujos en el afán de mostrar su mano. Entre muchos seudónimos usó el simple “Don y Cert”, una autoreferencia a su apellido recortador.
Contento tras participar en la disputa, para Joel el hecho de mostrar sus trazos fue muy positivo. "Siempre es bueno expresarse desde el dibujo y así tomé esa experiencia, la que agradezco a El Diario”, dijo el joven.
Joel concursó en la Escuela de Bellas Artes de Lanús, “donde fui invitado como artista joven y distinguido”, recordó.
El joven tiene en claro que su profesión es “la de ser dibujante, aunque en la actualidad no viva de eso”. Doncert nació en Liniers y se crió en el conurbano sur de Adrogué. Actualmente vive en el barrio San Martín junto a su esposa Rocío y Brunito, su pequeño hijo de 9 meses. “Me gustaría compartir con él este amor”, ansió el mentor, entusiasmado.
El joven quiere que su hijo sea como él, y en relación a esto afirmó: "Dibujo desde el vientre de mi madre". Joel aseguró que nació con este amor profundo por la ilustración y que siempre se sintió libre al dibujar, expresar sus sentimientos y lo que ocurre a su alrededor y el de otras personas que quiere.
Al momento de sentarse frente a la mesa, le gustan las temáticas sociales y deportivas y su proyecto en el arte consiste en utilizar el humor gráfico para reflexionar mediante ‘Tronco’, su personaje más querido. Aunque también utiliza otros como ‘Bely y Chuchu’, con quienes tuvo su oportunidad en el diario "Todo un país". ‘Pullido’ fue otra de sus creaciones que publicó en la revista bonaerense "Mundo Mascota".
En esa galería de dibujos originales, Joel utilizó remates en un cuadro pero explicó que tiene muchos otros creados. “Los de remate más largo son los de ‘Tronco’, donde tocó temas internos del ser y son más reflexivos. De igual manera, los chistes cortos me gustan porque son un desafío interesante captar la atención y a la vez lograr un buen remate”.
Esa tendencia la logró gracias a su profunda admiración por dos maestros del humor gráfico: Quino y Miguel Dobal. A ellos quiere imitar también en su fuente de ingresos. “Mi gran meta es trabajar en El Diario de la República, ver mi trabajo publicado todos los días en la contratapa sería un gran objetivo cumplido”, destacó.
El propósito del dibujante no es exagerado, ya que su ídolo, Felipe Miguel Ángel Dobal, es un humorista gráfico y escritor que formó parte de la revista "Don Fulgencio", de Lino Palacio, hasta que fue contratado por Clarín para publicar una tira diaria.
Durante años Dobal fue el único humorista de la página final, hasta que en 1973 Clarín creó la mítica contratapa del matutino donde compartiría cartel (durante 23 años) con Caloi, Fontanarrosa, Altuna, Trillo, Crist, Ian, Tabaré, Sendra, Jorge Guinzburg y Carlos Abrevaya.
Aún en vigencia, entre otros trabajos, Dobal dibujó en los diarios Crónica y La Razón, Damas y Damitas, El Hogar. “Con él emprendí en el humor gráfico, fue muy importante en mi carrera de dibujante, sobre todo me enseñó a amar al dibujo, toda mi vida le estaré agradecido”, dijo Joel.
En cuanto al tiempo que le lleva realizar un chiste, el autor dijo que es relativo. “A veces la inspiración viene de inmediato, otras veces trabajo mucho en lectura y analizo a mi alrededor y en base a eso comienzo a crear”, explicó Doncert. “La creación comienza con un boceto de la idea inicial y luego cuando ya estoy seguro, trabajo en papel ilustración para ultimar detalles”, manifestó sobre sus métodos.
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