Javier Rosales tuvo un domingo que difícilmente olvidará por el resto de su vida. El atleta puntano que prácticamente fue el encargado de abrir la participación sanluiseña en los Juegos Evita, cosechó dos medallas de oro, las únicas que hasta este momento tiene San Luis.
Bien temprano, Javier fue el más veloz en los 200 metros y festejó en lo más alto de podio. Pero todavía quedaba un resultado que iba a sorprender a todos incluso a él mismo. El joven de 18 años fue el mejor en salto en largo con 6 metros, mejor marca personal en su carrera, y le dio la segunda alegría a San Luis. “Estoy muy feliz por el logro y por haber superado el récord que era 5,98”, contó exhausto pero exultante después del doble logro.
Javi como lo llaman sus amigos tiene una discapacidad mental, es mercedino, alumno de la escuela especial Maria Montessori, que fue la primera escuela de la provincia que anotó a sus chicos para la edición 2016 de los Evita. Participa de estas competencias desde 2012 y como todas los años anteriores consiguó la doble medalla en estas dos especialidades. Rosales es también, campeón sudamericano en Brasil en velocidad y en salto en largo. Le contó a El Diario que tiene el sueño de seguir probándose a nivel internacional.


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