Los motociclistas no paran de cometer infracciones, así lo demuestra las seiscientas motos secuestradas que alberga el playón de Tránsito, en la Comisaría Primera. Aseguran que por día ingresan más de treinta y que la mayoría de las retenciones se deben a la falta de papeles en regla o la inexistencia de ellos que comprueben la propiedad del rodado o la habilitación para manejarlo. Indicaron por día sólo cinco infractores acuden a recuperarlos.
"Actualmente no tenemos espacio, lo que estamos haciendo es llevarlas a las comisarías de jurisdicción, a la zona del operativo donde se detectó la infracción, o al parque municipal, que depende del mismo juzgado, pero también está colapsado”, señaló la subcomisario Natalia Pereyra, a cargo de Tránsito.
Además indicó que el playón de la calle Falucho, donde funciona esa dependencia, tiene una capacidad para seiscientas o setecientas motos, pero siempre está lleno, porque a medida que los dueños retiran sus vehículos, van ingresando otros.
Pereyra señaló que los motivos más frecuentes por los que se secuestran los rodados son: la falta de licencia, de casco, el vencimiento del seguro y la falta de transferencia del vehículo.
Una vez que la moto queda retenida, la única manera de recuperarla es pagar la multa y presentar la titularidad de la misma. Pero muchas veces pasa que los motociclistas no pueden presentar dicha documentación.
La subcomisario también mencionó que en esa playa tienen rodados que llevan unos tres años en infracción, y que incluso, hay secuestros de mayor antigüedad, pero en esos casos se decidió el traslado al predio que se encuentra en el Parque Industrial Sur.
“Anteriormente, Tránsito disponía ese depósito al cual, pasados seis meses de la retención, trasladaban las motos. Pero ahora ese espacio pertenece al Poder Judicial, que lo utiliza para las retenciones por causas penales, no por multas. Debemos guardar las motos en el playón y en las comisarías, hasta que la venga a buscar el titular”, dijo.
Hay ley, pero no se aplica
Delfor Sergnese, actual concejal del bloque Compromiso Federal explicó que en el año 2012 la Cámara de Diputados aprobó una reforma a la ley provincial 112 que fue sancionada el 28 de noviembre de 2012. Indicó que la legislación actualizada (Nº IV-0831-2012), establece que una vez secuestrado un vehículo, la Policía deberá suscribir un acta inventariando detalladamente el estado en que se encuentra y remitir, en un plazo máximo de 48 horas, una copia certificada del acta a la Oficina de Secuestros Judiciales.
"También dice que el rodado secuestrado deberá ser trasladado en el mismo plazo al Depósito Judicial, donde se practicarán las periciales y se lo pondrá a resguardo. Es decir, que los vehículos no pueden estar en las comisarías, por un plazo mayor al que establece dicha ley", aseguró.
Además, destacó que la ley determina que el juez deberá proceder de inmediato y realizar los pedidos de informes para identificar a sus legítimos propietarios e informar a la Oficina de Secuestros Judiciales si se ha podido identificarlos o no.
Otro aspecto importante que señaló fue que en caso de que los vehículos estén relacionados a un robo tienen que ser devueltos a las víctimas, después de que se compruebe la propiedad de los mismos como indica la ley. Y que de no hacerlo, dentro de en un plazo de seis meses, serán tomados por abandonados y subastados.
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