Héroes de la tinta

En la antigüedad los juglares eran los encargados de repartir las noticias a través de los pueblos, una actividad que solían hacer contando y cantando, en oportunidades sostenida con dibujos de parodias y caricaturas como sostén visual pero a la vez de denuncia graciosa. Los tiempos cambiaron, la tecnología avanzó pero algunos de aquellos viejos trucos persisten.

Algo que hizo recordar a aquella época sucedió en el Concurso de Historieta y Tira Diaria que El Diario de la República organizó por sus 50 años. Una vez que el jurado abrió los sobres, uno de los miembros, el periodista de este medio, Mariano Medina, dijo que se vio “un nivel parejo en Tira Diaria, y lógicamente un gran porcentaje estuvo volcado al humor, como objeto de denuncia o despertar de conciencia”.

Casualmente, Medina está trabajando en la actualidad en un proyecto de comics puntanos junto a otros amigos amantes de los dibujos, en un proyecto de San Luis Libro. Su autorizada voz siente que “los dibujantes acá tienen muy  difícil el terreno para desarrollarse”.

Tras charlar con los participantes al certamen, Mariano coincidió con los artistas en que el concurso que acababa de culminar fue único en la provincia y casi a nivel nacional. De allí, que varios comiqueros de otras provincias hayan enviado sus trabajos.

La entrega de premios a los ganadores fue el jueves a la tarde en el auditorio de El Diario de la República. Allí estuvieron los premiados, el jurado y representantes de este medio.

Una de las características que quedó demostrada con la calidad exhibida fue la variedad en géneros y estilos que permite el arte dibujado. De lápiz solo a composiciones en color digital o incluso de acuarelas, que son trabajos que llevan más tiempo de desarrollo, se presentaron en el certamen.

El fandom comiquero sanluiseño tuvo su momento de premiación con la entrega de las menciones a una propuesta que caló hondo en el sentimiento de los dibujantes locales. Y también de algunos de afuera: tres de los finalistas surgidos de la decisión final son de Buenos Aires y por una cuestión de logística y traslado no pudieron estar en el acto. A ellos, les enviaron sus galardones.

Uno fue el ganador del primer puesto de “Tira Diaria”, Héctor Omar Martín, quien envió sus trabajos bajo el seudónimo “Buster Keaton”. Quien sí estuvo en la  entrega -y muy contento- fue el puntano que trabajó detrás del nombre ficticio “Francio I”. Los dos primeros puestos ganaron un premio en efectivo.

Franco Pablo Vega tuvo un doble mérito ya que compartió el podio en lo más alto de la categoría “Historieta” y obtuvo una mención especial en la “Tira Diaria”. Lo que se dice un dibujante completo y dispuesto. “Este tipo de concursos no son muy comunes, mucho menos en el interior del país, así que es meritorio que El Diario haya llegado tan lejos con esta idea”, dijo el ganador, profesor de Arte y Diseño en la escuela digital Albert Einstein.

 Con eso, Vega o "Francio I" desligó a las grandes ciudades argentinas con respecto de la hegemonía que mantienen con el resto de las provincias, no sólo en cuestiones artísticas o de organización.

Las menciones especiales para la “Tira Diaria” quedaron en manos de “Francio II”, o sea  Vega; Julián “Pituco” Camezzana, Facundo “Industrias Fip” Ávila, Enrique “Polo Rojo” Cadaveira y Roxana “Apu” Patricia Vassolo.

“Apu” fue la única mujer en conseguir una mención. “Es un rubro muy masculino, entonces haber quedado es mucho mérito y un orgullo”, declaró Vassolo, para quien este concurso “fue como una varita mágica, una puerta abierta por la que pasé”.

En el apartado  de “Historieta”; los puestos siguientes al ganador   fueron para Emilio “Emi” Utrera, Erick “Ericksiano” Nereo Busto, Hugo “José” Casamor, Franco “El Ninja” Luna y Martín “Más Cómics” Salinas. Un detalle respecto a ese participante -ex editor del suplemento ETC de este medio- es que su ídolo es “Superman” y, como Clark Kent en su personalidad escondida, es periodista.

A pesar de ser un circuito pequeño el de los comiqueros puntanos, varios de los ganadores se conocieron en el auditorio de El Diario de la República el jueves. Entre gaseosas y meriendas, los dibujantes quedaron en juntarse para contarse sus ideas y proyectos, mientras en las sillas o al cuidado de algunos parientes y amigos que se acercaron -en calidad de fotógrafos sociales- estaban los premios que habían recibido hacía instantes.

Los merecedores de las menciones especiales se hicieron de maletines porta-tableros de dibujo, varios artículos para dibujar como reglas, escuadras, y microfibras y lápices de distinta medida y grosor, incluso una paleta para pinturas. Para los ganadores de cada categoría hubo 10 mil pesos en efectivo.

La alegría de encontrarse y saberse ganadores los animó a participar en cuanto concurso aparezca posteriormente, detrás de su máximo objetivo, llegar (y salvar) al mundo con sus trabajos.