La mayor cantidad de nieve cayó en Villa de Merlo y La Carolina

En esta aventura congelada hay quienes prefieren encerrarse a estudiar, a trabajar, a comer cosas ricas, a ponerse al día con su serie favorita, o a terminar de leer un libro; otros prefieren entrar en calor, y salen a “chapotear” y jugar con la nieve, aunque después aparezca un resfrío. La Carolina y Villa de Merlo fueron las localidades en las que más nevó, en una se registraron cuarenta centímetros y en la otra treinta. En ambas, debido al manto blanco, hubo zonas sin luz.

Ayer en el pueblo minero persistían la llovizna y el agua nieve, los accesos estaban bloqueados y Vialidad Provincial trabajaba para despejarlos. En la ciudad del microclima caían enormes copos y el camino al Filo seguía bloqueado con casi ochenta centímetros de nieve. 

El director de Vialidad Provincial, Daniel Bassi, explicó que el foco estuvo puesto en la limpieza del acceso a La Carolina, porque fue la zona más crítica, con cuarenta centímetros de nieve acumulada.

“Estamos trabajando en diferentes zonas. Ya limpiamos la Autopista de las 'Serranías Puntanas’,  ruta Nº 7; Cuatro Esquinas; El Volcán, la Cuesta del Gato; y las calles que están detrás del Cruz de Piedra, entre otras. Quitamos el hielo que estaba sobre las calzadas, con la ayuda de dos camionetas de apoyo y dos motoniveladoras”, afirmó y agregó que los caminos de Paso del Rey, La Carolina e Inti Huasi, fueron despejados.

Bassi aconsejó a los vecinos que no salieran de sus casas, a menos que lo necesitaran con urgencia porque la llovizna y la escarchilla caían de a ratos.

“Hay bancos de niebla espesos, el asfalto está congelado y eso es peligroso. Consideramos que esta noche (por ayer) dejará de nevar y esperamos que comience a levantar la temperatura. Está pronosticado que desde el miércoles suba a 16 grados”, dijo el jefe del área Emergencias de San Luis Solidario, Darío Zavala.

El intendente de La Carolina, Alberto Ferraro, dijo que durante las nevadas, y con la ayuda del Ministerio de Desarrollo Social, asistió a los vecinos de la zona con provisiones. “Nos movimos en las camionetas del centro hípico de la Comuna, porque no podíamos acceder de ninguna manera. Estamos intentando llegar hasta los parajes más alejados para verificar que estén bien”, aseguró el jefe comunal y añadió que en algunas viviendas estuvieron sin luz.   

Su par de El Trapiche, Marcelo Páez Logioia, aseveró que conformaron un comité de emergencias junto a la policía, el centro de salud y los bomberos voluntarios de la Comuna. “Estamos en permanente comunicación con el Ente de Control de Rutas y San Luis Solidario. Decidimos hacer relevamientos para conocer cuáles son las necesidades de quienes están más alejados de la zona urbana. Sólo resta esperar a que cambie el clima. Tenemos luz y en cuanto estén limpias las rutas, ingresarán proveedores de gas natural”, afirmó Páez Logioia y agregó que los comercios tienen alimentos y todavía quedan algunas garrafas. Además contó que tienen listos bolsones con comida para repartir en caso de que los necesiten.

Explicó que para estar comunicados con las diferentes áreas de gobierno utilizaron WiFi y “handys”, que les proporcionaron los bomberos de la Comuna, ya que en las zonas más afectadas por el temporal no había señal telefónica.

Ayer hasta las 17 en Villa de Merlo, los copos de gran tamaño dejaron de caer y la Municipalidad emprendió otra vez la limpieza de calles para dejar todos los caminos accesibles.

Sin embargo, un hecho curioso se produjo cuando los bomberos del cuartel de la Comuna y los de San Javier de Córdoba se enteraron que había un puestero atrapado en uno de los refugios, ubicado a diez kilómetros de donde termina el camino al Filo, en Córdoba, hacia adentro de uno de los campos. Después de tres horas de travesía, llegaron, pero el esfuerzo fue en vano: el hombre estaba bien, dijo tener alimentos para dos o tres días más, además de abrigo y se negó a dejar su lugar de trabajo. "Nos causó sorpresa, pero optó por quedarse”, contó el secretario de Gobierno de la Municipalidad, Oscar Pérez, y agregó que el grupo de personas que quedó atrapado el domingo  estaban más abajo y del lado de San Luis. “Por eso fue más sencillo traerlos, eran todos puesteros de la zona que bajaron a pie junto a los bomberos”, agregó.

El funcionario admitió que en algunos sectores los vecinos se quedaron sin luz. “Edesal tuvo que limpiar algunos cables, el peso de la nieve acumulada sobre las ramas de los árboles hizo que se desconectaran algunos de ellos. A la gente le pedimos que no suba a las sierras, es hermoso el paisaje, pero pueden quedar atrapados o puede haber accidentes”, concluyó Pérez.