Sempro: el 50% de las urgencias es por accidentes de tránsito

Los accidentes de tránsito en rutas y calles de la provincia representan la mitad de las urgencias que atiende el Sistema de Emergencias Provincial (Sempro). Según datos del organismo, de las 200 solicitudes de asistencia en ambulancia que reciben mensualmente, el 50 por ciento son para pacientes involucrados en los siniestros viales, categorizados por los estándares médicos internacionales como código "rojo", el de máxima peligrosidad debido a que suponen riesgo de muerte.

El jefe del Sempro, José Nuñez, dijo que actualmente cuentan con diez bases donde diariamente aguardan las unidades móviles de alta complejidad ante un pedido de traslado. En cada intervención, la atención está a cargo de un médico, un enfermero y un chofer. 
"Mientras que los protocolos internacionales indican que un código 'rojo' no debe tener una demora superior de 10 minutos, tenemos un tiempo de 4 minutos 46 segundos. En el 'amarillo' que indica riesgo de mortalidad, llegamos en 8 minutos y en el alerta 'verde', 8 minutos 27 minutos", aseguró Nuñez, quien agregó que los accidentes de tránsito son la principal causa de muerte entre jóvenes menores de 30 años.

Las actuales bases funcionan mayoritariamente en Villa Mercedes (4) y San Luis (3); mientras que en La Punta, Merlo y Cortaderas hay un móvil por cada una de esas ciudades.

"Hace cuatro años que funciona el Sempro y permitió mejorar la calidad de atención porque antes las ambulancias tenían que salir desde los hospitales con los médicos. Eso generaba muchas demoras de hasta dos y tres horas en las que los heridos quedaban tirados en la calle. Ahora la asistencia es inmediata", sostuvo el titular del Sempro. Afirmó además que los tiempos de espera de las ambulancias "son excelentes", ya que son la mitad de los rigen a los protocolos internacionales.

El trabajo rutinario en las unidades de emergencia -algunas inclusive son una reproducción de una sala de terapia intensiva pero móvil- es exigente, ya que a diario se enfrentan a situaciones de extremo estrés por lo impactante de las heridas y también -según Nuñez- de peligro, debido a que tienen que desempeñarse en escenarios nada agradables con sangre, desesperación e incluso agresiones de familiares de accidentados cuando hay retraso en la asistencia.

Tampoco es sencillo lidiar con las falsas alarmas, ya que todos los días ingresan llamadas solicitando los servicios de emergencias, pero cuando las ambulancias llegan a la ubicación indicada resultan ser bromas de mal gusto.

"Generalmente pasa en San Luis y Villa Mercedes, que llegan las ambulancias y resultan ser falsos casos, como el de un menor que siempre llamaba e imitaba gemidos. Rastreamos la llamada y fuimos hasta la casa para hablar con los padres. Las operadoras ya están acostumbradas a este tipo actitudes", explicó Nuñez.